NUEVA LEGISLATURA
Rudi cerrará con el PAR la estructura de su Gobierno la próxima semana
La presidenta asegura que no hay «ni listas ni cuotas» para ocupar las direcciones generales, en las que estarán los aragonesistas
ROBERTO PÉREZ
El Estatuto de Autonomía de Aragón identifica únicamente como Gobierno a los puestos de presidente, vicepresidente, consejeros y viceconsejeros. Por debajo de ahí no se considera en sentido estricto Gobierno, sino estructura administrativa. Pero es evidente que los puestos de directores generales son esenciales para ... la acción del Ejecutivo. Y lo serán más aún durante esta legislatura, en la que la nueva presidenta, la popular Luisa Fernanda Rudi, ha decidido «adelgazar» la composición del Gobierno regional al decidir que no haya ni vicepresidente ni viceconsejeros y, además, eliminar tres de las doce consejerías y concentrar las competencias en nueve departamentos.
Los puestos de directores generales pasan a verse reforzados en su perspectiva política. Serán la correa de transmisión inmediata de la acción de gobierno en las áreas de los distintos departamentos. De ahí que se busquen perfiles técnicos, pero también con componente político. Y, de ahí también, que en el reparto y composición de las direcciones generales estén presentes los compromisos del pacto de gobernabilidad firmado entre el PP y el PAR.
Rudi resolvió la conformación de su Ejecutivo autónomo en menos de veinticuatro horas desde que tomó posesión de su cargo de presidenta de la Comunidad. Accedió al puesto el jueves por la tarde, y el viernes por la mañana ya estaban nombrados todos los consejeros. Pero queda pendiente ahora nombrar a los directores generales.
Es seguro que el PAR va a tener una representación destacada en estos puestos. De esa forma, cuenta con posiciones directas en la acción de gobierno, aunque no forme parte en sentido estricto del Ejecutivo autónomo.
Rudi quiere acelerar al máximo la conformación de las direcciones generales, para poner en marcha a pleno rendimiento la maquinaria del Gobierno regional. El primer paso es dejar configurada la estructura: cuántas direcciones generales va a haber, de qué competencias se va a encargar cada una de ellas y, a continuación, designar a quienes las ocupen. De estas tres fases del trabajo, dos ya están bastante avanzadas. Rudi confía en dejar aprobado el número de las direcciones generales y sus competencias la próxima semana, posiblemente el próximo lunes, en el que será el primer Consejo de Gobierno en el que el Ejecutivo autónomo empieza a adoptar decisiones de gestión.
Menos puestos
Rudi anunció en su discurso de investidura que el número de altos cargos —y esa es la consideración de los directores generales— se reducirá no menos de un 25 por ciento respecto a la estructura que había hasta ahora. Eso significa que habrá menos direcciones generales. Algo que, a su vez, es consecuencia también de la reordenación del Gobierno, tras haberse reducido y redistribuido las competencias de las doce anteriores consejerías a las nueve que han quedado.
La designación de los nuevos directores generales es materia de negociación entre PP y PAR, aunque ambos partidos insisten en que no se trata de repartir puestos, sino de buscar perfiles adecuados para cada uno de ellos. «No hay ni listas ni cuotas, sino que se buscará a las personas más adecuadas», afirmó esta semana Luisa Fernanda Rudi.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete