Rubalcaba trata el «gravísimo» problema del paro en un mitin cerrado a los medios

Su avión llegó con retraso. Por ello, apareció en el Palacio de Congresos de Santiago media hora más tarde de lo previsto. A las doce en punto, Alfredo Pérez Rubalcaba departió con los medios en privado. Trató el problema del paro, aunque con mucha menor profundidad de lo que luego haría en un coloquio-mitin con los militantes cerrado a los reporteros. Pisando la huella abierta por Alberto Núñez Feijóo —que en una entrevista concedida a ABC alertó de que no hay dinero para acabar el año en la sanidad pública—; en la charla reservada a la prensa cayó en un juego conminatorio. Las comunidades recibirán el ejercicio que viene 8.000 millones de euros adicionales «para que se dediquen» al capítulo de la salud, anotó. «A ver si lo hacen, si no lo hacen vamos a preocuparnos de que lo hagan», añadió.

El mensaje estaba claramente dirigido al presidente gallego, porque él «habla sobre todo» de este ámbito. Con la guerra abierta entre el gobierno autonómico y el central ante la aplicación del catálogo priorizado de medicamentos, legitimado por el Tribunal Constitucional, espetó que permanecerá «atento», dado que la gestión de este monto corresponde a las autonomías. El ministro del Interior se atrevió incluso con una recomendación a Feijóo: «Piense cómo ahorra y destina estos recursos, ante sus excusas para hacer recortes en la sanidad gallega». Y de sanidad, a incendios forestales. «Pusimos a la Unidad Militar de Emergencias, UME, desde el sábado (25 de junio); el domingo estuvimos preocupados, y el lunes, en una rueda de prensa, hice mención de los fuegos», refrendó. «Lo que hice fue trabajar para solucionar un problema de los gallegos sin preocuparme o no de cómo lo hacía la Xunta, que ese es otro tema», dejó caer. «Alguna vez alguien tendrá que decir lo que hizo la UME y lo que no hizo la Xunta», endilgó. Medio Rural le reprochó que no intensifique la seguridad para detener a los culpables de esta lacra. Otra finta abierta y otra receta.

«Voy a dar mi recomendación, con modestia y estilo. Que Feijóo se dedique a gobernar y no me dedique tanta atención, porque son mucho más importantes los gallegos que Rubalcaba», encasquetó. Ante las preguntas referidas a su bicefalia, y a si maneja algún plazo para abandonar sus cargos actuales en Moncloa; otra vez nombró al titular del Ejecutivo autonómico. «No se lo voy a decir al señor Feijóo. Debe ocuparse menos de mí».

Dentro, y con los suyos, fue presentado por el secretario general de los socialistas gallegos, Manuel Vázquez. «Bos días, buenos días», empezó «Pachi». «Este es un acto importantísimo para el socialismo. Nos esperan grandes momentos con Alfredo», vaticinó, y empleó para el augurio su nombre de pila, sabedor de su interés en resaltarlo, por encima de los apellidos. «Nos aguarda un momento ilusionante. Este gobierno hizo grandes cosas, corrigió el déficit, reformó las pensiones, el sistema financiero... Pero hay algo que provoca una brecha, una gran brecha, y es el paro...». En ese momento, los informadores presentes en la sala fueron invitados a irse, con el aviso de que este evento «no era abierto». En un comunicado posterior, se envió a todas las redacciones el mensaje a resaltar, para su elaboración «vía refrito». A puerta cerrada, Rubalcaba desgranó los pormenores de las últimas medidas aprobadas por el Consejo de Ministros. Se refirió a la nueva línea del Instituto de Crédito Oficial por importe de 3.400 millones, pensada para que los ayuntamientos abonen sus facturas pendientes con pymes y autónomos. Antes, había abordado este tema con los medios. También mencionó, en sendos lugares, el impulso a la clase emprendedora y el decreto ley que eleva hasta los 961 euros la parte del suelo que no se puede embargar a los afectados por una ejecución hipotecaria. «Se trata de que la gente no acumule a la desgracia de tener la hipoteca ejecutada, la miseria de no poder subsistir», sostuvo ayer.

Sobre el paro, «gravísimo» problema, dijo: «Me voy a esforzar por explicar a la gente que sé lo que tenemos que hacer para crear empleo, y que tengo las propuestas para hacerlo. Preparo un programa creíble y ejecutable, con medidas que todo el mundo pueda ver que se llevan a la práctica, centradas en resolver el gran problema de los españoles, que es el empleo. España está económicamente mejor que hace dos años, gracias a las medidas y reformas puestas en marcha con las que hemos evitado la situación de Grecia, y el Gobierno se está esforzando por paliar los problemas adicionales de la crisis». Escuchándolo, entre otros, los ministros de Fomento y Justicia, los gallegos José Blanco y Francisco Caamaño, respectivamente; el delegado del Gobierno en Galicia, Miguel Cortizo; y la plana mayor de los socialistas gallegos, con un exultante Abel Caballero, alcalde de Vigo.