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Este cuartel es una ruina

La falta de medios y agentes en las recién inauguradas dependencias de la Guardia Civil en Milladoiro queda reflejada en sus datos de efectividad, los peores de toda la Comandancia de La Coruña. Interior abandona así a su suerte a los 47.000 vecinos de la zona y carga las tintas sobre una plantilla escasa

PATRICIA ABET / ELENA PÉREZ

«Es un ejemplo para toda Galicia y para toda España, porque para nosotros es absolutamente fundamental que las instalaciones de la Policía y de la Guardia Civil sean objeto de nuestra financiación y de la ayuda y concurso de otras instituciones». Con estas palabras el director general de la Policía y de la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez —ante la presencia del secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, y el delegado del Gobierno en Galicia, Miguel Cortizo— alababa las virtudes de la nueva casa cuartel de Milladoiro el día de su inauguración, hace menos de un mes.

También presente en el acto, el ya ex alcalde de Ames, el socialista Carlos Fernández, añadía: «Las obras quedan y las palabras se las lleva el viento». Y precisamente eso es lo que ha pasado; mucha infraestructura para tan poco contenido y productividad.

Parcela infrautilizada

Unas modernas instalaciones en las que el Gobierno central ha invertido 2,9 millones de euros y que, a día de hoy, registran los peores números en efectividad de toda la Comandancia de La Coruña, es el resultado de la gestión de Interior con la casa cuartel del municipio compostelano, que si bien presenta las mejores imágenes en apariencia; no es oro todo lo que reluce. La falta de medios técnicos y humanos en el acuartelamiento mantiene en vilo a los más de 47.000 vecinos de la zona sobre la que tiene competencias, incluyendo a los municipios de Teo y Ames, que ya han empezado a emitir las primeras quejas.

En total 4.320 metros cuadrados de parcela infrautilizada, con dos edificios —uno de viviendas para el personal y el otro de dependencias oficiales— sin agentes para ocuparla. De los 35 oficiales que integran la plantilla (cinco mandos y 30 agentes), hasta el momento hay 13 Guardias Civiles de baja médica, incluido el mismo comandante de Puesto. Todo indica que, de no solventar la precaria situación de los trabajadores, que luchan entre la impotencia y la indefensión, se van a producir muchas más.

Si la normativa vigente cifra la ratio en un agente por cada 1.000 habitantes, en este caso los indicadores fallan. La plana al completo de Milladoiro supone 1 agente por cada 1.300 vecinos; y en la actualidad la deficiencia de personal supone que cada Guardia Civil debe atender a más de 2.100. Las cifras, por mucho que se intenten maquillar, hablan por sí solas, a pesar del empeño que ponen delegación y la subdelegación del Gobierno en La Coruña para restarles importancia. Frente a la escasez de medios humanos en la casa cuartel de Milladoiro, otros municipios como Cambre, Culleredo, Oleiros y Carballo, con mucha menos población; cuentan con una cobertura media de 55 efectivos, al igual que Arteixo que no supera los 40.000 censados.

Desbordados y sin medios

La constante falta de personal ocasiona que se encuentren desbordados por el trabajo que existe y los problemas internos, que limitan el número de efectivos para realizar el servicio. Habitualmente solo sale un Guardia Civil de patrulla. Por parte, incluso de los propios mandos de este acuartelamiento, se llevan pidiendo desde hace años, más hombres, coches y medios en general, siendo contestados en la inauguración de este puesto principal por el propio director general: «Existe un número suficiente de personal y medios a disposición de los ciudadanos», dijo.

Queda claro que Francisco Javier Velázquez debía desconocer al hacer tal afirmación que el cuartel dispone únicamente de dos linternas que los agentes han de compartir y que carecen de algo tan simple como sprays de defensa, equipos de señalización en controles o chalecos. Además, en la casa cuartel de Milladoiro permanece un solo agente que se encarga de recoger denuncias y atender la seguridad. En cuanto a los exteriores, el complejo carece de cámaras y cortinas. Y todo esto siendo la Comandancia que acumula una mayor subida en el número de delitos cometidos este año (101,3 por ciento) en relación al mismo periodo de tiempo del año pasado.

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