Pasadas ya algunas semanas desde la finalización de las obras de remodelación de la calle Cruz Conde, ya son palpables algunos efectos inmediatos. El más evidente es la elevada afluencia de personas por este punto del Centro de la ciudad. Sin embargo, hay otras consecuencias más ocultas que también se están produciendo. Según distintos comerciantes consultados por ABC, desde la conclusión de la intervención se ha producido una revalorización de los locales ubicados a lo largo de toda la calle. El presidente de la Federación Provincial de Comercio, Rafael Bados, indicó que esta actuación ha traído consigo un incremento «muy importante» del precio de los inmuebles en Cruz Conde en relación al periodo anterior al inicio de las obras. «Nos los han comentado varios empresarios de la zona», aseguró Bados.
Estas declaraciones son refrendadas por distintos comerciantes del enclave preguntados por este diario, aunque ninguno de ellos se atreve a dar algunas cifras respecto al encarecimiento del precio del metro cuadrado en la zona. El gerente de la Joyería Naycar, José Antonio Navajas, señaló que «posiblemente se han revalorizado los locales en la calle, pero no creo que haya sido mucho, debido a que no hay mucho dinero».
Ventas sin apenas cambios
El propietario de la tienda de ropa Primavera, Ignacio Reyes, mira más al futuro al afirmar que «lo normal» es que el encarecimiento de los espacios comerciales sea más patente en los próximos meses. «Esperemos que sea así», apuntó este comerciante minorista.
La actividad comercial lleva algunos años de constantes caídas en sus niveles de ventas. Con la peatonalización integral de la calle Cruz Conde, estos empresarios esperaban una mayor afluencia de personas y, en consecuencia, más compras por parte de éstos en sus establecimientos.
La primera premisa sí se ha cumplido. La segunda, no. «Vemos más público que antes de las obras, pero Córdoba está muy mal económicamente hablando por la crisis y esto no se traduce en más ventas», recalcó Reyes. «No tenemos más clientes, pero sí se ve a más gente paseando por aquí», apuntó Navajas, quien, no obstante, se mostró confiado en que, una vez que se supere la crisis, la peatonalización de la calle suponga un mayor número de transacciones.
Hay excepciones, ya que algunos comerciantes sí han percibido un crecimiento de sus ventas. Es el caso de Blas Ventosa, propietario de la Mercería La Central, quien declaró que las compras en su local se han elevado un 15 por ciento. «Ahora que no pasan coches y las obras han terminado la gente tiene más tranquilidad a la hora de poder pasear y entrar en las tiendas», agregó.
Comercio Córdoba está muy interesado en conocer el impacto real de la peatonalización de Cruz Conde, por lo que tiene previsto realizar a lo largo de la primera quincena de junio una encuesta entre sus asociados de la zona para palpar realmente si las ventas se han incrementado con la intervención, entre otros aspectos. Bados informó de que los resultados de este estudio se presentarán de forma oficial a finales de ese mes o principios de julio.
En líneas generales, los minoristas de la calle están satisfechos con el aspecto final del enclave, una vez que operarios y máquinas han abandonado el lugar. «Es evidente que el aspecto de la calle ha cambiado radicalmente para mejor y que ha sido una actuación que ha beneficiado a toda la ciudad», resumió el máximo responsable de Comercio Córdoba, quien recordó que su colectivo fue el primero que apostó por la peatonalización de la calle. El Ayuntamiento, en un primer momento, se negó, pero a mitad de las obras cambió de opinión para disgusto de vecinos y taxistas.
Sin embargo, hay algunos detalles con los no están de acuerdo la mayoría de empresarios consultados por este periódico. La queja más repetida es la falta de pendiente del suelo, lo que provoca que cuando llueve o cuando se riega la zona el agua se quede estancada. Otra petición es la sustitución del actual alumbrado, ya que las farolas acumulan ya varios años de funcionamiento.
