Detenidas 24 personas por narcotráfico en Cantabria

La operación se ha saldado con la intervención de 11 kilos de speed, de los que se calcula que se podrían haber obtenido cerca de 43.000 dosis, 6,2 kilos de marihuana, 156,4 gramos de cocaína, 203 comprimidos de psicotrópicos, hachís, setas alucinógenas y sustancias de corte. También se han intervenido tres turismos y una furgoneta, 24 teléfonos móviles, cinco armas cortas y un rifle ametrallador simulado, además de cuatro invernaderos para el cultivo de marihuana junto a accesorios necesarios para su cultivo.

La red la dirigían dos hombres jóvenes, en torno a los 30 años, que vivían en Santoña (Cantabria), aunque uno es natural de esa localidad y otro es de origen extranjero. La organización actuaba en Cantabria, en Santoña y la zona de las Siete Villas con diferentes tipos de droga, principalmente cocaína, marihuana y speed, y distribuía esa última sustancia en Andalucía.

Aunque la operación comenzó el pasado mes de octubre las primeras detenciones se produjeron en mayo, cuando algunos integrantes de la red realizaban un viaje a Andalucía para trasladar droga. De los 24 detenidos (17 hombres y siete mujeres), 16 son de Santoña y cinco más de otras localidades cántabras cercanas. Hay otro que es de Basauri (Vizcaya) y se ha detenido a dos personas más, en El Sexmo (Málaga) y Vejer de la Frontera (Cádiz).

La sospecha sobre una mujer de Santoña, que podría dedicarse a la venta de cocaína, speed, marihuana y pastillas, puso a la Guardia Civil sobre la pista de esta red. Mediante el seguimiento de esta persona, los agentes llegaron hasta quienes suministraban los estupefacientes. Según explica la Guardia Civil, estos dos individuos mantenían contactos habituales con otros vecinos de esta localidad, lo que llevó a este Cuerpo a pensar que se trataba de una red que operaba desde esta población y que también distribuía en Cádiz y Málaga.

De hecho, las primeras detenciones se produjeron el pasado 5 de mayo, en un dispositivo que interceptó dos vehículos que realizaban un viaje a Andalucía. Los guardias civiles sospechaban que uno de los dos vehículos actuaba como "lanzadera" para ir avisando de la presencia de patrullas policiales al otro, que llevaba la droga.

Los agentes detuvieron a los dos ocupantes del turismo y, posteriormente, hicieron lo mismo con los que viajaban en un segundo coche, que se dio la vuelta para ver qué había pasado y fue interceptado. Ese mismo día y los siguientes se practicaron nuevas detenciones y registros en domicilios y garajes.