Blanco «vende» ladrillo español en Londres
Será la primera parada de un «road show» de Fomento que también irá a Francia, Alemania, Países Bajos, Suecia y Rusia
El ministro de Fomento, José Blanco, aseguró hoy en Londres que la caída de los precios de la vivienda en España ya ha concluido en líneas generales su proceso de ajuste y que, por lo tanto, es el momento idóneo para invertir en España.
«Tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, ya se ha producido la mayor parte del ajuste» , con caídas de más del 20%, e incluso del 40% en algunas zonas del país, lo que hace de España «un escenario propicio para la inversión inmobiliaria», manifestó.
El Gobierno asegura que «ya se ha producido la mayor parte del ajuste»
El ministro de Fomento ofreció una conferencia de prensa en la embajada de España tras reunirse con inversores británicos, en el inicio de una «ronda informativa», que pasará también por Francia, Alemania, Países Bajos, Suecia y Rusia , con la que el Gobierno español quiere dar salida a las 700.000 viviendas vacías que hay en España.
El 61% de esas viviendas se concentra en el litoral español, razón por la cual el gobierno apuesta por encontrar compradores en quienes buscan una segunda vivienda vacacional.
Londres fue la primera parada, porque hay 850.000 británicos residentes en suelo español y porque España sigue siendo su destino turístico preferido de vacaciones, con 13 millones de visitas anuales.
Pese a reconocer que los precios todavía pueden acumular bajadas puntuales en algunos lugares del país, Blanco consideró que este es el momento de dar salida a esas viviendas, que también representan una rémora para el sector financiero, que tiene en sus manos decenas de miles de propiedades.
En España residen 850.000 británicos de forma permanente
Subrayó que la situación actual es consecuencia de la convicción que hubo a finales de la década de 1990 y a principios de la de 2000 de que la economía española podía seguir creciendo sin fin -«de aquellos lodos vienen estas aguas»-, y destacó la importancia de recuperar un sector vital para España, sobre todo para la creación de empleo.
El ministro indicó que será bueno que las entidades financieras puedan dar circulación al «stock» de viviendas en sus manos para poder liberar el crédito que necesitan los ciudadanos, las empresas y la recuperación de la economía.
Argumentó que cuando este proceso ocurra no hay razón para pensar que habrá una caída adicional de precios, porque « el sector financiero tiene más sobredimensión en lo que se refiere al suelo, que en el 'stock' de viviendas».
Corredor anunció que se mejorará la seguridad jurídica en la vivienda
Blanco estuvo acompañado por la secretaria de Estado de Vivienda, Beatriz Corredor, quien hizo hincapié en que el precio de la vivienda libre en España ha descendido una media del 15,4%, llegando a ser en términos reales en algunas provincias del 24%.
En los municipios de más de 25.000 habitantes, la caída ha sido del 25%, con descensos más elevados en algunos lugares de la costa, como Menorca (49%), Marbella (40%) y Torrevieja (31%).
Corredor destacó datos positivos en el mercado como que en 2010 se registraron 491.000 operaciones de compraventa de viviendas, un 6% más que en 2009 y «el primer incremento tras tres años de caídas».
Anunció que el Gobierno quiere mejorar «la seguridad y la transparencia» del sistema, de cara a los futuros y presentes compradores, y aseguró que hará lo que esté en su mano para solucionar el problema de quienes compraron sobre plano propiedades que nunca se construyeron y que se quedaron sin sus ahorros por la quiebra de las sociedades promotoras.
Corredor explicó que se ha pedido a las comunidades autónomas que elaboren un registro para conocer los casos y poder actuar, una medida solo adoptada hasta ahora por Andalucía.
Los casos de británicos que han sufrido este problema y que se sienten desamparados por parte de las autoridades españoles son denunciados con frecuencia en la prensa local, lo que incrementa la sensación de que en España no hay seguridad jurídica en el sector.
Corredor afirmó que «la protección de los tribunales españoles está a su disposición», mientras que el ministro destacó que son casos aislados y recordó que los denunciados por los británicos «no representan ni al 1%» de los 850.000 residentes.
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