Ángel, el «poli de la guarda»

El agente de Policía Ángel Sánchez Albarrán, de 30 años, era ayer el centro de atención periodística en el acto de entrega de las Medallas al Mérito Policial y Ciudadano de la Comunidad de Madrid. Se resistía una y otra vez a que le retrataran, pero todos querían conocer en carne y hueso al hombre que, sólo dos meses después de su juramento como policía, protagonizó unas espeluznantes imágenes que dieron la vuelta al mundo: salvó por décimas de segundo a un hombre que había caído a las vías del Metro de Madrid. Con gravísimo riesgo de perder la suya propia. Y, además, estando fuera de servicio.

Aquella tarde del 3 de diciembre, en contra de su costumbre, no iba a tomar el autobús, sino el Metro, para ir con su novia al centro a realizar unas compras. «Cuando estaba en el andén, oí voces. El hombre se había caído a las vías y se veía la claridad del tren, que llegaba, estaba a punto de entrar», explicaba ayer. Entonces, fue cuando se lanzó a por él y, como dijo la presidenta regional, Esperanza Aguirre, toda la escena pasó en apenas 33 segundos. «No sentí miedo, porque todo fue muy rápido y no me dio tiempo a pensar. Luego, por la noche, cuando vi las imágenes en televisión, se me pusieron los pelos de punta», se confiesa. Su novia presenció todo y sufrió un ataque de histeria, como es normal.

Ángel, que fue el ángel de la guarda del hombre accidentado, que además cayó en el andén de Puerta del Ángel, sintió mucho cuando, once días después, murió el chico: «Cuando me enteré, me dolió. Su madre me llamó para darme las gracias por lo que había hecho». Este joven y altísimo policía, natural de Alba de Tormes (Salamanca), asegura que volvería a hacer lo mismo «una y mil veces» y que, «aunque la formación recibida como policía te ayuda a afrontar situaciones así, habría actuado igual aunque no fuese agente». Eso sí, considera que condecoraciones y homenajes como los de ayer también «se lo merecen otros muchos compañeros que están en la calle y no se les reconoce su labor». Ha recibido la enhorabuena del director general de la Policía y la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, y de Esperanza Aguirre, que ayer no escatimó buenas palabras para el funcionario policial, que acudió al acto acompañado de buena parte de su familia.

También fueron condecorados el oficial jefe de la Policía Local de Majadahonda desde hace 28 años, Estanislao Gil, y el Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz, al que Aguirre puso como ejemplo del buen funcionamiento de las Brigadas Especiales de Seguridad Ciudadana, las Bescam. Al acto acudieron personalidades del mundo de las fuerzas de seguridad, la judicatura y la política madrileñas.