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Los mercados sucumben

La OCDE alerta de que el impacto económico será mayor que el del seísmo de 1995

Y. GÓMEZ

Las principales plazas bursátiles del mundo sucumbieron ayer al miedo de una catástrofe nuclear en Japón y a las consecuencias que el debate abierto sobre este tipo de energía pueda tener en el resto del mundo.

El índice Nikkei de la Bolsa de Tokio fue, un día más, el peor parado. Ayer se desplomó casi un 10,55%, su tercera mayor caída de la historia. Además, en solo dos días se apunta un retroceso del 16,1%, lo que significa que se han evaporado 151.000 millones de euros de capitalización bursátil.

Y es que las noticias sobre el impacto que el terremoto, el posterior tsunami y ahora la alarma nuclear tendrá en la economía del país no son precisamente optimistas. La OCDE aseguraba ayer que el impacto económico de esta catástrofe «puede ser mucho peor que la que causó el seísmo en Kobe en 1995. «Aunque el área afectada por el terremoto de la semana pasada, medida en su peso en el PIB nipón, es más o menos comparable a la perjudicada por el Kobe, «el desastre del 11 de marzo puede ser mucho peor».

En el lado positivo, sin embargo, la organización recuerda que aunque este tipo de desastres reducen la actividad en el corto plazo, en el largo, las tareas asociadas a la reconstrucción «suelen impulsar el crecimiento de la producción».

En este mismo sentido, se manifestó ayer en Madrid Jan Egbert Sturm, profesor del Instituto Federal Suizo de Tecnología y coautor del Informe CESifo sobre la economía europea 2011. Sturm argumentó que el impacto del terremoto en la economía mundial será muy limitado, entre otros motivos por el efecto sustitución. Así, por ejemplo, los automóviles que no produzcan las empresas japonesas, los harán las alemanas o las estadounidenses. E incluso si no existiera este efecto, el impacto sobre el crecimiento mundial sería de unas décimas. Si el PIB nipón es aproximadamente el 5% de la economía mundial, una contracción de la economía japonesa del 5%, apenas supondría un 0,25% en el PIB mundial.

Castigo a Merkel

Aún así, los mercados europeos, especialmente el alemán, sufrieron ayer duras penalizaciones. Los inversores castigaron la decisión de la canciller Angela Merkel de aplazar la ampliación de la vida útil de las nucleares. El índice Dax de Fráncfort se dejó ayer un 3,19%. También el CAC de París cayó un 2,51%. Más moderadas fueron las pérdidas del Ibex, un 0,83% al cierre, pese haber caído casi un 3% en algunos momentos de la jornada. El tirón de los bancos salvó al mercado español, con un peso limitado de las compañías industriales.

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