Los Príncipes aceptaron la herencia para que se quedara en España

ALMUDENA MARTÍNEZ-FORNÉS

02/03/2011
Actualizado 03/03/2011 a las 17:44h.

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El Príncipe de Asturias ha explicado esta mañana en Mahón que él y Doña Letizia aceptaron la herencia que les dejó el empresario menorquín Juan Ignacio Balada, valorada en algo más de nueve millones de euros, para "asegurar que los españoles se beneficiaran de su patrimonio", ya que el difunto dejó establecido en su testamento que si los miembros de la Familia Real renunciaban a ella, "sus bienes pasarían a las arcas públicas del Estado de otro país". En concreto, Israel. No obstante, agregó: "Teníamos muy claro que el dinero que recibiésemos lo destinaríamos también a fines de interés social".

Don Felipe hizo estas aclaraciones durante la visita que ha realizado con la Princesa a Menorca para materializar la entrega de su parte de la herencia y otros fondos de la Fundación Hesperia, creada con la mitad de la herencia recibida, a la Fundación para Personas con Discapacidad de la isla FPDIM.

Juan Ignacio Belada falleció en noviembre de 2009 y dejó herederos de la mitad de su patrimonio, a partes iguales, a los Príncipes de Asturias y los ocho nietos de los Reyes . Además, encargó a Don Felipe y Doña Letizia que crearan una fundación de interés general con la otra mitad de la herencia.

"La Princesa y yo no conocíamos a Juan Ignacio Balada", ha explicado esta mañana Don Felipe, "y por eso fue toda una sorpresa cuando fuimos informados del contenido de su testamento". Agregó que "lo habitual hubiera sido que renunciásemos a la herencia", pues "era lo más sencillo; lo menos complejo; la solución más fácil". No obstante, "renunciar a la herencia hubiera supuesto, "por decisión del propio señor Balada, que sus bienes pasasen a las arcas públicas del Estado de otro país". Aunque Don Felipe se mostró "seguro de que ese Estado (Israel) lo habría destinado a un buen fin , benéfico o incluso —con alguna indicación— lo podría haber dedicado a algún fin de interés para ambas naciones", le pareció que "esa no era la manera más directa o mejor para asegurar que los españoles se beneficiaran de su patrimonio".

"Por esa razón —afirmó—, l a Princesa y yo decidimos aceptar la herencia y el encargo de constituir, con la mitad de sus bienes, una fundación destinada a fines de interés general. Pero, además, teníamos muy claro, como no podía ser de otra manera, que el dinero que recibiésemos lo destinaríamos también a fines de interés social".

cuando los Príncipes anunciaron su decisión de donar su parte de la herencia, la Fundación para Personas con Discapacidad de la Isla de Menorca (FPDIM) les envió una petición. "La estudiamos y nos convenció". Así, continuó, "tomamos la decisión de destinar los fondos que percibiésemos de la herencia a vuestra fundación para ayudaros a crear empleo, específicamente en el ámbito de los jóvenes discapacitados de Menorca, de donde era natural y donde vivía Juan Ignacio Balada ".

Esta mañana Don Felipe y Doña Letizia han visitado las sedes de la Fundación para Personas con Discapacidad en Mahón y Ciudadela, a las que han destinado los 95.000 euros de la parte de la herencia que han recibido hasta el momento y otros 45.000 procedentes de la Fundación Hesperia. Después de conocer su trabajo, el Príncipe les dijo: "Estamos orgullosos de vosotros, de la gran labor que desarrolláis" y agregó: "Estoy seguro de que el señor Balada estaría hoy satisfecho de ver el destino que le hemos dado al dinero que nos legó y que hemos recibido".

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