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Aznar se une a Rajoy en un acto de partido en plena resaca Cascos

Ambos participarán, en León, en una cumbre de representantes del PP en el exterior

REUTERS

CRISTINA DE LA HOZ

El próximo día 14 José María Aznar participará en un acto de partido que el responsable del PP en el exterior, Alfredo Prada, ha organizado en León. La cumbre, de dos días de duración, contará con María Dolores de Cospedal en la inauguración y con Mariano Rajoy en la clausura y pretende reunir, entre otros, a Alberto Núñez Feijóo, a Manuel Fraga, a Alfonso Fernández Mañueco y a Ana Mato, todos ellos nombres que han jugado, de una u otra manera, un papel fundamental en el «caso Cascos».

Significado especial

Será el primer acto público de partido que la dirección nacional celebra tras la crisis abierta por quien fuera mano derecha de Aznar como secretario general del PP y como vicepresidente primero del Gobierno. De ahí que la participación del ex líder popular en el acto de León, donde se dirigirá a los asistentes durante el almuerzo del viernes, tenga especial significado. Como ya informó ABC, Cascos continuará en el Patronato de FAES a cuyas dos últimas reuniones, celebradas en junio y diciembre pasados, decidió no asistir.

También hablará en León Manuel Fraga, quien no dudó en apoyar las aspiraciones de Álvarez-Cascos, tal y como hizo el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, quien participará en el acto de clausura el sábado 15 junto a Rajoy, Juan Vicente Herrera y Alfredo Prada.

Génova ha convocado a la «I Cumbre del PP en el Exterior» a todos los presidentes y secretarios generales de 25 países y más de medio centenar de delegaciones dónde tienen sede, así como a los representantes de las Comunidades y del Parlamento en el extranjero. La idea es movilizar a parte de ese millón y medio de ciudadanos con derecho a voto que viven fuera de España y que con su papeleta pueden determinar el destino de algunos escaños en Comunidades como Castilla-León, Murcia o La Rioja.

La inauguración correrá a cargo de Cospedal, que se mostró siempre muy refractaria al regreso político del ex secretario general. A Cospedal le antecederá en el uso de la palabra la persona a la que Cascos llegó a remitir hasta cuatro cartas pidiendo amparo por alusiones o insultos recibidos de distintos dirigentes del PP asturiano sin recibir respuesta: el presidente del Comité de Derechos y Garantías y, también, secretario general de los populares castellanoleoneses, Alfonso Fernández Mañueco.

Derrota segura

El PP pretende continuar con su agenda deseoso de que el «efecto Cascos» se diluya, pero éste está muy activo a falta de aclarar si concurrirá a las elecciones al Principado de Asturias. Ayer, en declaraciones a Onda Cero y RNE, señaló que «cualquier cosa que ocurra a partir de ahora no empeorará las cosas» para el PP de Asturias, ya que lo que asegura su derrota es la actual dirección, afirmó.

Interrogado sobre si se presentará a las elecciones creando una nueva formación política o bajo otras siglas dijo que «cualquier posibilidad puede ser interesante para defender el orgullo de ser asturiano», entre ellas «crear la Sociedad de Amigos del País de Asturias, siguiendo la tradición de Jovellanos», aunque descartó hacerlo bajo las siglas del CDS. Tras afirmar que desde su renuncia no ha mantenido «contactos políticos» ni con Aznar ni con Esperanza Aguirre, consideró que Rajoy, tiene «todas las condiciones» para ganar las elecciones, aunque añadió que «los partidos hay que jugarlos». El PP «tiene la obligación de asegurar la victoria» y ésta «no se resuelve sentados en un sillón, esperando a que el tsunami de votos les llegue».

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