Puig eliminará las medidas que impulsó ICV para «uso y disfrute»

El nuevo conseller de Interior, Felip Puig, niega haber accedido al cargo con afán de revancha; sin embargo ya ha anunciado que la «zona 80» o el código de ética de los Mossos d'Esqua- dra, dos de los legados más importantes de los ecosocialistas, podrían pasar a la historia en breve. En su primer acto oficial como conseller, Puig avanzó ayer que borrará o revisará las medidas que Joan Saura impulsó sólo para el «uso y disfrute» de su formación.

En declaraciones a los periodistas, el nuevo titular de Interior matizó, no obstante. que aquellas iniciativas impulsadas por su antecesor que considere positivas las van a mantener. «Este no es el gobierno de ICV, ni el de CiU, es el gobierno de Cataluña», subrayó el convergente, que se comprometió a ser «diligente y eficaz» a la hora de adoptar las decisiones necesarias para «revisar o corregir» las medidas de Saura que cree que no cuentan con el apoyo de la mayoría de catalanes, informa Efe. En este sentido, el nuevo titular de Interior se comprometió a revisar cuanto antes medidas como la limitación de la velocidad a 80 por hora en los accesos a Barcelona. El ahora presidente de la Generalitat, Artur Mas, prometió incluso antes de la campaña que eliminaría esta limitación, si bien ahora Puig defiende una posición más flexible y en sus intervenciones públicas se decanta por revisar al alza esta limitación en determinadas franjas horarias. Puig adelantó que se darán prisa en revisar esta medida, ya que, según dijo, «no tiene sentido» que a las 23.00 horas se tenga que ir por vías de tres carriles por sentido a tan sólo ochenta por hora, cuando considera que «se podría circular a cien o a ciento diez por hora».

Como ya avanzó incluso antes de asumir el cargo, Puig afirmó que revisará el código de ética de la policía —que Saura aprobó con la oposición de los mandos y de los sindicatos policiales—. Además, el conseller lamentó que ICV le acuse de actuar con ánimo de revancha ya que, según recordó, cuando los ecosocialistas llegaron al gobierno de la mano del tripartito no dudaron a la hora de paralizar proyectos en marcha como el Túnel de Bracons, bloquearon propuestas económicas por su ideología y aplicaron un «revisionismo histórico» por intereses de partido.

Oposición «obcecada» Por otro lado, Felip Puig denunció que la oposición sigue «obcecada» con la manera partidista de hacer política del siglo XXI y lamentó que criticaran el discurso de fin de año del presidente Artur Mas sin entender que los catalanes quieren «compromiso» «generosidad». Puig subrayó que Mas planteó en su mensaje navideño cuestiones clave como compromiso, generosidad, y grandes retos y acuerdos de futuro.