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CARMELO BOROBIA

El obispo auxiliar abandona su cargo al cumplir la edad de jubilación

MARÍA JOSÉ MUÑOZ

El arzobispo auxiliar de Toledo, Carmelo Borobia Isasa, abandonará próximamente su cargo en la diócesis primada tras cumplir la edad de jubilación, 75 años, algo que hizo el pasado mes de agosto, momento en que presentó su renuncia al Papa. De carácter afable y gran formación, monseñor Borobia es una persona muy querida en la diócesis, tanto por los sacerdotes como entre los fieles, y en los años que lleva como obispo auxiliar ha recorrido todos los pueblos y conocido todas las parroquias. El 21 de octubre de 2004 fue nombrado obispo auxiliar de Toledo, junto con monseñor Ángel Rubio, siendo arzobispo de Toledo Antonio Cañizares.

Nacido en la localidad navarra de Cortes el 16 de agosto de 1935, monseñor Borobia fue nombrado en 1990 obispo axiliar de Zaragoza, y el 24 de mayo de 1996, obispo de Tarazona, cuya catedral fue sometida a una complicada restauración gracias a su intercesión. El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, se queda sin obispo que le asista en su labor pastoral.

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