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DÍA INTERNACIONAL DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD

Un día muy especial

Andrés Gómez Mora Pte. Caja Rural y Padrino de Marsodeto

Hoy es un día muy especial, el Día Internacional de las Personas con Discapacidad. Una fecha que debe hacernos reflexionar y motivarnos para seguir luchando toda la sociedad unida por la mejora de la calidad de vida de las personas con capacidades diferentes. Nunca dejo de admirarme de la ilusión, la energía, la paciencia, el tesón y el ejemplo que nos dan estas personas. Todos los días nos dan una lección de vida y nos enseñan a apreciar las pequeñas cosas.

El pasado mes de abril acepté con una enorme ilusión mi nombramiento como Padrino 2010 de la Federación Provincial de Entidades Pro Personas con Discapacidad Intelectual y Parálisis Cerebral de Toledo (Marsodeto). Desde entonces he visitado varios centros de la Federación en Talavera, Ocaña y Torrijos, donde he podido comprobar de primera mano el impagable trabajo que se hace en estos centros y que la sociedad nunca agradecerá lo suficiente. Para mí el contacto directo con los usuarios y trabajadores de estos centros y la contemplación de su loable trabajo está siendo una experiencia única que marcará toda mi vida. Siempre he reseñado que las personas con capacidades diferentes tienen una alta capacidad productiva y aportan muchas cualidades a la sociedad, ya que poseen virtudes que la mayoría de la gente no tiene, como habilidades, paciencia y, sobre todo acudir cada mañana al trabajo con una sonrisa, lo que es muy bonito y ejemplarizante.

El respaldo que Caja Rural de Toledo ofrece a las personas con capacidades diferentes es para nosotros una responsabilidad que ejercemos de manera gustosa y solidaria para preservar la dignidad, los derechos y el bienestar de estas personas. Por ello hemos contratado a siete personas con discapacidad intelectual para digitalizar toda la documentación interna de nuestra Entidad, a través de un convenio de colaboración con el Centro de Capacitación Cecap. Este fue el primer proyecto europeo en el que personas con discapacidad intelectual utilizaban la herramienta informática como instrumento laboral. Esta experiencia ha marcado un antes y un después en la inserción socio-laboral de las personas con capacidades diferentes, ya que sus resultados han demostrado que pueden realizarse trabajos de máxima complejidad con absoluta eficiencia. A raíz de sus buenos resultados, la experiencia se ha extendido a la Academia de Infantería, la Diputación Provincial y el Arzobispado de Toledo. La iniciativa ha sido conocida por 17 países europeos y en la actualidad este modelo de trabajo se exporta a Hungría.

Pero nuestra Entidad también mantiene convenios con colectivos que representan a personas con algún tipo de discapacidad, como Apace, Apanas, Amafi o Cecap. Gracias a ellos Caja Rural de Toledo aporta financiación a dichas asociaciones para facilitar la inserción laboral y la autonomía social y personal de estas personas. La discapacidad es una manifestación más de la diversidad humana, que la sociedad ha de acoger como elemento enriquecedor que ensancha la humanidad y le agrega valor. Lo que pensemos o digamos de las personas con capacidades diferentes puede iluminar muchas zonas de sombra de nuestro porvenir como sociedad. Sin igualdad en términos de capacidades diferentes no podrá configurarse una sociedad avanzada.

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