Dos «rottweiler» matan a un hombre y hieren a su hijo en su finca de Córdoba

El propietario de los animales que en la noche del pasado miércoles acabaron con la vida de un hombre y causaron heridas de gravedad a su hijo —ambos vecinos de la localidad cordobesa de Carcabuey— ha quedado en libertad con cargos tras su detención por parte de agentes de la Guardia Civil. El dueño de los dos perros de raza «rottweiler», uno de ellos cruzado con un «pitbull», ha sido imputado por un presunto delito de homicidio por imprudencia y otro de lesiones por imprudencia.

Poco antes de que se produjera el ataque, el propietario de los animales había denunciado esa misma mañana a la Benemérita la desaparición de los canes de una nave en la que se realizan actividades comerciales relacionadas con la venta de queso, ubicada en las inmediaciones de la carretera A-3226, en el término municipal de Carcabuey. Desde allí los canes debieron deambular por las inmediaciones hasta llegar a la finca de la víctima, situada en el paraje denominado como del Masegal, a unos 500 metros de la empresa.

Al parecer, F.G.R. de 55 años de edad, falleció a causas de las lesiones provocadas por las graves mordeduras de los perros que le sorprendieron en el interior de su propiedad, que además se encuentra vallada, en la que estaba cuidando a unos caballos. Ante la tardanza en regresar al domicilio su esposa e hijo decidieron ir en su búsqueda, sorprendiéndoles la presencia de los perros que también atacaron a J.G.G., de 29 años. Los animales le provocaron diversas heridas inciso-contusas en los brazos y las piernas. Según ha podido saber ABC, fue la mujer del fallecido la que avisó del suceso desde el interior del vehículo, ya que el carácter agresivo de los animales podría haber impedido que se bajara del automóvil.

Tras la llamada desesperada de la mujer, se presentaron en el lugar agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil de Carcabuey y personal sanitario, quienes vieron a los perros sueltos en un picadero de caballos que tiene la parcela, situada en zona de sierra. Allí mismo atendieron al joven que se encontraba refugiado en una cuadra tras haber sido atacado, y que fue trasladado hasta el hospital Infanta Margarita de la vecina localidad de Cabra, donde ingresó con pronóstico grave. Desde ayer se encuentra hospitalizado en el área de traumatología, en la cuarta planta. Su padre ya estaba muerto cuando llegó el personal sanitario.

Al tener constancia de la desaparición de los «rottweiler», los agentes avisaron al que resultó ser el propietario quien reconoció en el lugar de los hechos que eran los perros buscados. Fue este hombre, con ayuda de los agentes, quien logró controlarlos y recluirlos en el interior de una cuadra.

Al parecer, los animales se encuentran al día en lo que se refiere a la documentación pertinente, seguros y vacunas. Los documentos han sido presentados por el imputado a la Guardia Civil, que se ha encargado de verificar su autenticidad. Respecto al futuro de los perros, hasta que no finalice la investigación no se podrá determinar si serán sacrificados.

La víctima era una persona muy conocida en Carcabuey, ya que durante años fue el director de la sucursal bancaria de la localidad, aunque ahora trabajaba en la vecina población de Lucena.

El suceso reabre el debate sobre la peligrosidad de determinadas razas de perros, que son utilizados habitualmente para vigilar viviendas o naves industriales. En los últimos diez años una veintena de personas han perdido como consecuencia de ataques similares. El último caso ocurrió el pasado 23 de octubre en Mataró (Barcelona) donde aparecieron los cadáveres de dos indigentes que habían sido mordidos hasta la muerte por una jauría de canes.