Marruecos se libra de un «valiente y magnífico corresponsal»

Ante el acoso a Luis de Vega, Reporteros sin Fronteras destacó ayer en un comunicado: «Al periodista de ABC, corresponsal desde hace nueve años en Marruecos, se le suspendió la acreditación sin ninguna advertencia por parte de las autoridades responsables... En este caso, ninguna autoridad judicial fue requerida para que fueran verificados los hechos alegados contra él. Lamentamos una avalancha de decisiones administrativas que no van sino en el sentido de un endurecimiento de las relaciones entre Marruecos y España». Reporteros sin Fronteras, además, exigía a Rabat que pusiera «fin a la censura sobre los acontecimientos en el campamento de El Aaiún».

Tanto la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), como alguna de las organizaciones de periodistas marroquíes integradas en la Federación Internacional de Periodistas (FIP), han elevado a los gobiernos de Marruecos y de España la protesta y condena «por el maltrato que la Policía y otros funcionarios públicos marroquíes han dispensado a los periodistas», en especial, a Luis de Vega. La Asociación de la Prensa de Madrid (APA) subrayaba: «Obstaculizar el trabajo de los periodistas es un indicador evidente de que procuran ocultar infamias y violaciones de los derechos». La APA llamaba la atención por «la tibieza, lentitud y debilidad del Gobierno español para condenar estos hechos».

En términos parecidos se manifestó la Asociación de Editores de Diarios Españoles (AEDE). Apoyando expresamente a Luis de Vega, la AEDE confiaba en que las instancias nacionales e internacionales tomaran las medidas «necesarias para que la libertad de expresión y el derecho a informar sean respetados».

Mariano Rivero, coordinador de la Agrupación de Periodistas de UGT, tras solidarizarse con ABC y de forma muy singular con un «gran profesional» como Luis de Vega, condenó al Gobierno de Marruecos igualmente por «falsificar los hechos».

«El trato que hemos recibido ha sido denigrante», dijo ayer la periodista Àngels Barceló por teléfono a ABC, que hablaba también en nombre de dos compañeros suyos de la cadena Ser. Los tres, tras pasar una noche detenidos en El Aaiún, fueron expulsados ayer del Sahara. Y los tres, por supuesto, condenaron la medida contra De Vega y el hecho de que «Madrid no se hace respetar».