Hazte premium Hazte premium

Montilla defiende los nuevos tipos de familia horas antes de recibir al Papa

Los matrimonios homosexuales, con o sin hijos, también «merecen atención», afirma el President

J. C. VALERO

Horas antes de recibir al Papa, el presidente de la Generalitat y candidato del PSC a la reelección, José Montilla, defendió ayer los nuevos tipos de familia, como «los matrimonios homosexuales, con o sin hijos y las familias monoparentales», porque a su juicio «todas merecen atención». También destacó que en los 7 años de tripartitos se han creado «una media de 15 plazas de guardería al día» y que se ha modernizado el código de familia para incluir a las parejas de hecho, además de promover la custodia compartida.

Encaramado en una tarima de color rojo, Montilla dirigió su discurso relámpago a los ciudadanos que estaban en el parque de la Guinegueta, en el corazón de Nou Barris, bastión del voto socialista en Barcelona. El President utilizó el castellano para insistir en el mensaje de su precampaña de que el tiempo del tripartito ha pasado y que por eso es necesaria una

mayoría socialista. Y lanzó su segundo mantra en el mismo idioma con la intención de combatir la abstención: «Obama ha perdido las elecciones porque la mayoría de sus votantes se quedó en casa. Y la derecha siempre va a votar», concluyó.

Por su parte, el candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat, Artur Mas, utilizó la moderación para reconocer ayer, con relación al aeropuerto de Lleida, que «el tripartito ha hecho algunas cosas bien». «Este es nuestro aeropuerto, porque es el de Lleida y de Cataluña», subrayó después de recordar la paternidad convergente del proyecto y de subrayar que estas apuestas son las que marcan la visión de Cataluña como «un sólo país», porque «no todo lo que es importante en Cataluña tiene que pasar en Barcelona».

Mas dejó la contundencia política a su número 8 por Barcelona, el alcalde de Sant Cugat, Lluís Recoder, quien contempló la posibilidad de reeditar el «tancament de caixes», la protesta que en 1899 emprendieron los catalanes que se negaron a pagar los impuestos por el aumento de la presión fiscal del Gobierno tras la debacle de la pérdida de las últimas colonias. La huelga fiscal sería utilizada ahora, según Recoder, como medida de presión al Estado para conseguir el concierto económico en el caso de que CiU no tenga la fuerza suficiente para condicionar la política española tras las elecciones generales.

PP y ERC se cruzaron acusaciones. Mientras la líder popular, Alicia Sánchez Camacho advertía del peligro de un nuevo tripartito de CiU-ERC y Joan Laporta, el cabeza de la lista republicana, Joan Puigcercós, hacía lo propio al decir que Cataluña se juega que la tercera fuerza sea su partido independentista o el PP.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación