Antonio López: «Así creé mi última escultura»
El artista cuenta cómo nació y elaboró «La mujer de Coslada», estrenada ayer en la localidad madrileña
ABC
En un escrito con motivo del estreno de su última obra, difundido por el Ayuntamiento con motivo del estreno ayer de «La Mujer de Coslada», Antonio López (Tomelloso, 1936) explica cómo ha visto la luz esta monumental escultura en bronce, de metros metros y 60 ... centímetros de alto, compuesta por 40 piezas unidas por soldadura con una estructura interior de acero para reforzarla y 3.000 kilos de peso.
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«El embrión o la primera idea de esta escultura de mujer -explica- nace incorporada a un grupo escultórico iniciado hace unos años y de momento abandonado que narra el relato bíblico de la creación del primer hombre Adán. Allí aparecía la cabeza de Eva naciendo en la base del grupo. Yo necesito siempre partir de modelos concretos para realizar mis trabajos, sean figuras humanas, paisajes, árboles o cualquier otro motivo. En una visita a la Facultad de Bellas Artes de San Fernando de Madrid vi a una estudiante de escultura, a la que llamaré por la inicial de su nombre, que me impresionó por el carácter de su belleza, que me pareció que correspondía con la Eva que yo había imaginado, y que aceptó servirme de modelo. Con F. trabajé en cera, a tamaño natural el cuello y la cabeza, mirando hacia arriba, a su creador, la terminé en unas semanas y la vacié en yeso.
Yo necesito siempre partir de modelos concretos para realizar mis trabajos
»Cuando mis amigos Julián y Francisco, vecinos de Coslada, me hablaron de la posibilidad de realizar para la ciudad una escultura de gran tamaño, pensé en esta cabeza de mujer. Yo sabía por la experiencia de una obra anterior, lo sorprendente y mágica que es una cabeza monumental en el espacio urbano.
»La reunión al poco tiempo con Pedro San Frutos, Concejal de Cultura y Participación Ciudadana, y Ángeles Roda, Directora de Cultura, en Coslada fue sencilla. Hablamos del tamaño aproximado, de la ubicación en una rotonda de la Rambla y del presupuesto. Todo fue y ha sido siempre claro y fácil. Vimos juntos en el estudio la cabeza de la mujer y nos pareció que agrandada podía ser la escultura para la rotonda. Creo que estas primeras conversaciones fueron por la Navidad del 2008.
»Cuando parecía que esta cabeza sería el tema de la escultura, sobre la marcha, pensé en la posibilidad de que la figura surgiera de la tierra hasta la mitad del vientre. Me pareció tan emocionante la idea de prolongar la figura que empecé una nueva escultura al regreso de F. de unos viajes de estudios fuera de España. Trabajamos en la nueva escultura desde octubre o noviembre de 2009 hasta el mes de abril de este año, dos horas cada día, de lunes a viernes. Yo quería que la escultura estuviera lo más terminada posible, porque tenía que crecer del tamaño real al que la estaba modelando, 68,5 cm de altura, a por lo menos cinco metros de altura, es decir, más de 8 veces mayor. Las formas tenían que ser limpias, delicadas y expresivas, como yo las veía en la mujer que me servía de modelo.
Una fotocopia de cinco metros
»Se hizo una fotocopia de 5 metros, se montó sobre un bastidor y la vimos en la rotonda para tener una idea de esta escala en el lugar donde iría la escultura, y también, en 4 metros otra fotocopia de la primera cabeza. La imagen de la segunda escultura, la mujer hasta la mitad del vientre, con los brazos hasta debajo de los codos ligeramente separados, con una desnudez yo diría que sagrada, nos pareció más atractiva, más original y decidimos que ésta era la escultura y que debía crecer un poco más, hasta los cinco metros y medio.
»Enseguida se empezó a trabajar en la ampliación. Se ha realizado en Barcelona y se ha traído en 44 fragmentos a la Fundición «Arte 6» en Arganda del Rey. Estos días de septiembre aún estamos trabajando en la escultura Julián, Paco y yo, con la ayuda de los fundidores. Después se patinará y se llevará terminada a Coslada. Se le ha colocado un sólo anclaje central en la base para que pueda girar sobre el granito de la rotonda para encontrar la mejor posición en relación con la luz solar y con el entorno. Si es posible me gustaría que la pátina, es decir, la coloración de la escultura fuera la del bronce mismo, de manera que sea el tiempo, la lluvia, el sol los que terminen el carácter de la pátina».
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