Los políticos se consolidan como el tercer problema que tiene España

La clase política y los partidos son la principal preocupación después del paro y la crisis, y más para los hombres que para las mujeres

MARIANO CALLEJA

12/10/2010 a las 01:48h.

Los políticos siguen siendo parte del problema que tiene España en este momento. Así lo perciben los ciudadanos entrevistados por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que sitúan a la clase política y los partidos como tercera inquietud más importante en nuestro país, solo por detrás del paro (que registra cifras históricas de desempleados) y la crisis económica (la más grave en 80 años, según reconoce ahora el Gobierno de Zapatero).

El paro repunta ligeramente como preocupación de los españoles en la cabecera de la tabla, según el último barómetro del CIS, realizado entre el 3 y el 13 de septiembre con una muestra de 2.473 entrevistas personales realizadas a domicilio. Casi ocho de cada 10 españoles (78,4 por ciento) sitúan el desempleo como principal escollo que tiene España, seis décimas más que en el barómetro de julio y dos puntos más que en septiembre de 2009 (76,3 por ciento). Como segundo problema nacional, los entrevistados apuntan a la crisis económica (un 48,2 por ciento). Y justo después aparecen los políticos, con un 19,8 por ciento.

Estos porcentajes son datos agregados de las respuestas espontáneas a tres preguntas: ¿Cuál es el principal problema que existe actualmente en España? ¿Y el segundo? ¿Y el tercero? La preocupación por la clase política y los partidos baja tímidamente respecto al barómetro de este verano, cuando registró un 21,6 por ciento, pero en todo caso se consolida en esa tercera posición, que ocupó en febrero de este año (con un 16,8 por ciento) tras superar como problema al terrorismo, y que todavía no ha perdido.

Crisis y corrupción

La pésima percepción de los ciudadanos hacia sus políticos (que no existía hace una década y que ha empezado a subir peldaños esta legislatura) se relaciona directamente con la crisis económica, y también con los casos de corrupción que han salido a la luz en los últimos tiempos. Los expertos en comunicación política coinciden en señalar que en caso de crisis los ciudadanos no castigan a sus gobernantes tanto por la caída económica como por su reacción para salir del agujero con los resultados que obtengan. En este caso, la negación de la crisis por parte del Gobierno, primero, cuando millones de españoles ya la sufrían, y después la política errática para combatirla, con bandazos de vértigo en muy poco tiempo, han derivado en una desafección de los ciudadanos hacia sus políticos.

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La preocupación por la clase política y los partidos (19,8 por ciento) es diferente según el sexo de los entrevistados por el CIS. Así, en el caso de los hombres sube hasta el 24,2 por ciento, mientras que las mujeres lo dejan en un 15,6 por ciento. Por tramos de edad, los españoles entre 55 y 64 años son los más críticos con los políticos: uno de cada cuatro (el 25,9 por ciento) los sitúa como uno de los principales problemas de España. Los más complacientes son los mayores de 65 años (13,6 por ciento) y los jóvenes de 18 a 24 años (16,3 por ciento).

Si se dividen los entrevistados en el barómetro del CIS por recuerdo de voto en las últimas elecciones generales (marzo de 2008), los más críticos son los votantes de CiU: el 31,6 por ciento ve a los políticos como uno de los tres principales puntos débiles que tiene España. A continuación se sitúan los votantes de IU (28,1 por ciento), los del PP (22,1 por ciento) y los del PSOE (17,1 por ciento). Los votantes del PP también apuntan como problema principal al Gobierno (10,8 por ciento): para ellos es la quinta contrariedad nacional, tras el paro, la crisis, los políticos en general y la inmigración.

Por categorías sociales, la clase política preocupa más a los agricultores (33,3 por ciento) y a los profesionales por cuenta ajena (29,7 por ciento) que a los jubilados y pensionistas (14,8 por ciento) o a los estudiantes (16,4 por ciento).

Precisamente, a los estudiantes les preocupa en la misma medida los políticos que el sistema educativo (16,4 por ciento). La educación en España es uno de los principales problemas para el 5,4 por ciento del total de los entrevistados, y preocupa más a las mujeres (6,6 por ciento) que a los hombres (4,1 por ciento).

ETA preocupa menos

En la lista de los problemas que tiene España aparece en cuarto lugar la inmigración, con un 15,4 por ciento, tres puntos más que en julio. El terrorismo y ETA se mantienen en el quinto lugar de las preocupaciones ciudadanas, con un 9 por ciento (siempre con el porcentaje agregado de las respuestas a las preguntas sobre los tres principales problemas de España). En el anterior barómetro del CIS, tenían un 5,5 por ciento. Cuando la pregunta es única (principal problema de España), y la respuesta es también una y espontánea, el terrorismo se queda en un 0,6 por ciento.

Hace un año, en septiembre de 2009, el terrorismo y ETA eran el tercer problema, con un 18,9 por ciento (dato agregado de las tres principales preocupaciones): casi 10 puntos más que en estos momentos.