En memoria del soldado desconocido
Un obelisco recordará en el entorno del Castillo de Burgos a los caídos en la Guerra de la Independencia
MAR GONZÁLEZ
El Castillo de Burgos fue uno de los lugares sitiados por los franceses durante la Guerra de la Independencia. En las proximidades, unas trescientas personas fallecieron sepultadas al ser bombardeada la Iglesia de San Román en la que se encontraban guarecidos. Doscientos años después, el ... Ayuntamiento de Burgos y el Foro para el Estudio de la Historia Militar de España buscarán sus restos y crearán la tumba del soldado desconocido, convirtiéndo así a la fortaleza en un monumento permanente a las víctimas del asedio.
El presidente del Foro para el Estudio de la Historia Militar de España, José María Espinosa de los Monteros, afirma que todavía queda mucho por investigar y conocer sobre la Guerra de la Independencia y sobre el asedio que sufrió Burgos, entre otros capítulos de la contienda. Según relata, se tiene constancia de que «unos trescientos “españolitos” llegados de Asturias, de una unidad de Cangas de Onís, fueron sepultados en la Iglesia de San Román que fue bombardeada» y, de acuerdo con las hipótesis que maneja, «los restos todavía tienen que estar allí, porque en medio de la guerra nadie se preocuparía de recuperarlos».
Ahora estos «locos de la historia», como el propio Espinosa de los Monteros describe al centenar de miembros de distintos países europeos que conforman el Foro, organizarán una excavación arqueológica para buscar sus restos, exhumarlos, realizar las investigaciones oportunas y darles sepultura.
Éste es uno de los objetivos del convenio suscrito con el Ayuntamiento de Burgos cuyo concejal de Cultura, Diego Fernández Malvido, explica que la intención del consistorio es restaurar el obelisco decimonónico que se encuentra en la explanada del Castillo y dedicarlo a la memoria de todos los soldados que cayeron en el asedio, españoles, británicos, portugueses y franceses, con indicación de las unidades a las que pertenecían.
Ruta del asedio
De este modo, se convertirá el Castillo de Burgos en un monumento permanente a todas las víctimas de la Guerra de la Independencia y se creará una «ruta del asedio» por el entorno de la fortaleza en la que se ubicará señalización y tablas informativas sobre los diferentes episodios de esta parte de la historia de la ciudad.
El convenio suscrito se enmarca además en la celebración del Bicentenario de la Guerra de la Independencia y del sitio y asalto del Castillo de Burgos por las tropas aliadas en el año 1812. Con ese motivo se está organizando para el año 2012 la celebración de un Foro Internacional y distintos actos conmemorativos como la recreación de las unidades que participaron. En el marco de esta conmemoración, ya se ha realizado en los dos ultimos años la recreación de la Batalla de Gamonal, que entonces era un pueblo independiente y actualmente es un barrio de la capital burgalesa. También se ha planificado la organización de conciertos de música de compositores de la época interpretados por orquestas nacionales y bandas militares de los países que participaron en la contienda. Diego Fernández Malvido destaca que su intención es concluir los actos de conmemoración de la Guerra de la Independencia con «un gran gesto de reconciliación internacional».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete