Uribe confirma la estrecha relación de ETA con las FARC

«Lo que no sé es de dónde fluye más el apoyo, si de ETA a las FARC o de las FARC a ETA, pero son evidentes sus relaciones». Es la opinión apoyada en datos y el conocimiento de los secretos de Estado que el ex presidente de Colombia, Álvaro Uribe, expuso ayer en la reunión del «European Ideas Network», el laboratorio de pensamiento del Partido Popular Europeo que dirige Jaime Mayor Oreja y que está reunido estos días en Budapest para debatir sobre los efectos de la crisis en la UE, sus políticas de seguridad y la amenaza del terrorismo.

Uribe, que acaba de abandonar este verano la presidencia de la República colombiana, uno de los países más castigados por el terrorismo, eludió referirse a la política exterior de su país y a aspectos como las relaciones con el régimen de Chávez, pero insistió en que las bandas terroristas se apoyan entre ellas en todo el mundo y recordó que está acreditado que tanto ETA como el IRA instruyeron a la narcoguerrilla colombiana en sistemas de preparación de explosivos.

«Las democracias deben ayudarse y cooperar entre ellas porque las organizaciones terroristas no conocen límites a su actuación», recordó Uribe además de recalcar que las FARC han sido «inmensamente ricas» gracias a la cocaína y que han conseguido la «tecnología» necesaria para preparar artefactos a través de la banda vasca. También previno, en genérico, ante los peligros del avance del terrorismo que siempre se da, insistió, a costa del retroceso de la democracia y las libertades.

En la misma convención, que cuenta con responsables y representantes de casi todos los partidos del centroderecha europeo —la mayoría en el poder salvo en el caso español— Mayor Oreja se refirió al peligro de que España, en plena crisis política y constitucional, se encamine hacia el modelo belga de autodisolución ante la ofensiva del nacionalismo y la debilidad o coincidencias de proyecto político de Zapatero con los propios nacionalistas.

Bélgica está al borde de la ruptura como Estado europeo y Holanda a punto de abrir una brecha en la OTAN por su desmarque de la misión en Afganistán. Mayor Oreja destaca el paralelismo o las relaciones entre la apuesta del nacionalismo catalán en su conjunto por «la autodeterminación» y el tira y afloja del Gobierno de Zapatero con ETA, incluido su brazo político, para mantener un proceso de negociación teniendo siempre en el horizonte ese mismo «derecho a la autodeterminación» que también plantea el nacionalismo vasco.

El ex ministro del Interior ETA, «además de banda terrorista, es en sí un proyecto de ruptura de España».