El líder del SPD es intervenido para donar un riñón a su esposa enferma

CORRESPONSAL EN BERLÍN

«Yo seré el donante», ha manifestado el jefe de filas del partido Socialdemócrata de Alemania al anunciar que su esposa va a necesitar un riñón y que abandona por ello la política «por un breve tiempo». Frank Walter Steinmeier, batido hace un año por Angela Merkel en sus aspiraciones a canciller, será intervenido de inmediato para intentar salvar a su mujer, la juez Elke Büdenbender, del deterioro renal progresivo que le afecta. En la tarde de ayer, ambos cónyuges fueron internados y están ya en manos de un equipo médico.

La necesidad de un trasplante es al parecer urgente, según han podido saber medios cercanos, que se dicen igualmente sorprendidos por la noticia. Steinmeier dice haber comunicado la decisión al presidente del partido, Sigmar Gabriel, y consensuado su sucesión por el vicepresidente del grupo legislativo, Joachim Poss. El ex vicecanciller y ex ministro de Exteriores se ha mostrado convencido de que pronto podrá volver a hacer una vida normal.

El jefe del grupo parlamentario socialdemócrata, de 54 años, y su mujer, de 48, llevan 15 años casados; Steinmeier pertenece al grupo de Hannover en torno al ex canciller Gerhard Schröder, del que fue jefe de gabinete, y fue el principal interlocutor en la coalición con los democristianos de Merkel. Steinmeier no es el primer líder del SPD con un gesto similar: en 2007, el ex presidente Franz Müntefering abandonó su cargo de vicecanciller para dedicarse a su mujer, entonces víctima de un cáncer y que fallecería al año siguiente.