El Valencia recuperó la sonrisa en el primer partido ante su afición y ofreció su mejor versión en esta pretemporada para batir con claridad a la Fiorentina por 2-0, lo que le sirvió para adjudicarse el Trofeo Naranja. Emery alineó de salida un once que puede ser muy similar al que comience la Liga y las sensaciones fueron muy distintas, aunque el acierto de cara a puerta no llegó hasta el último cuarto del partido, cuando coincidieron sobre el campo los dos delanteros centros del equipo por primera vez en todo el verano. El Valencia mostró más juego en los primeros 45 minutos que en el resto de amistosos jugados en esta pretemporada.
Los de Unai Emery, en su primer examen en Mestalla, se ofrecieron sin miramientos desde el primer minuto y exhibieron un fútbol rápido e intenso que no permitó al equipo italiano salir de sus dominios. Mata no tardó mucho en demostrar su nuevo rol en el equipo y a los 3 minutos pudo inaugurar el marcador de un potente disparo que obligó a lucirse al meta Boruc, el mejor de los italianos en el primer acto. Los continuos cambios de posiciones entre Pablo, Joaquín y Mata, así como las continuas subidas de los laterales fueron los aspectos más destacados en la faceta ofensiva de los valencianistas. Banega demostró que no ha olvidado el buen golpeo de balón que lució la pasada campaña y un duro lanzamiento desde fuera del área de nuevo puso en apuros a Boruc.
Los italianos se dedicaron a amontonar jugadores en su parcela, con un rápido repliegue de jugadores; mientras que en ataque Gilardino estuvo muy desasistido, ya que el equipo 'viola' apenas se acercó un par de veces con intención al área de Moyá. Tras un bajón de intensidad, sobrepasada la media hora, el Valencia recrobró bríos en el tramo final y buscó con ahínco el gol. De nuevo Mata, en esta ocasión de cabeza, disfrutó de la mejor oportunidad, pero una vez más se encontró con la respuesta inspirada del guardameta transalpino. En la reanudación, el Valencia jugó con menor intensidad pero siguió llevando el peso del partido. Fruto de ese dominio y de la variedad táctica en las jugadas a balón parado, los locales continuaban rondando el gol.
El premio al mejor juego valencianista llegó cuando por fin Emery se decidió a jugar con dos delanteros puros y dio entrada a Vicente por la banda izquierda. En apenas diez minutos sobre el campo, el extremo valenciano dio dos asistencias de lujo para que la pareja de delanteros estrenara su cuenta goleadora, con sendos cabezazos de Soldado y Aduriz que finiquitaron el partido y dieron al Valencia su trofeo veraniego.
Despedida de Mata
El Valencia 2010-11 se presentó de manera oficial ante su afición en un sencillo y discreto acto, en el que las pocos más de 23.000 personas que se dieron cita en Mestalla reconocieron la nueva categoría de estandarte del equipo que desde el club se le ha dado al futbolista Juan Mata. El único campeón del mundo que ha vuelto a las filas del Valencia tras el Mundial de Sudáfrica fue el último jugador de la plantilla en saltar al terreno de juego y su nombre fue coreado por los seguidores en un reconocimiento público de su nuevo estatus.
Finalmente, los jugadores con los que no cuenta el técnico Unai Emery y a los que el club busca una salida, como son los casos de Sunny Sunday, Hugo Viana y el internacional uruguayo Nacho González, no formaron parte de la presentación. El acto, muy alejado de los fastos de antaño, no contó con parlamento alguno, ni del capitán, ni del entrenador ni del presidente y concluyó con la interpretación del himno de la Comunidad Valenciana, que dieron paso al encuentro amistoso ante la Fiorentina.
