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El aumento del paro juvenil provocará «un incremento de la violencia» y de los disturbios sociales

Así lo asegura un informe de la Organización Internacional del Trabajo. En España, la tasa es de un 40,3%, la más alta de la Unión Europea

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A finales de 2009, el 13 por ciento de la población joven mundial de entre 15 y 24 años (o lo que es lo mismo, 81, 2 millones de personas, una cifra similar a la de los habitantes actuales de Alemania, de 620 millones en total) y con capacidad para trabajar se encontraba sin empleo, según el informe «Tendencias del Empleo Juvenil» que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha dado a conocer este miércoles. Ello provoca, según el citado estudio, un aumento de los disturbios sociales y del crimen y la violencia.

Entre finales de 2007, cuando comenzó la crisis económica mundial y finales de 2009, 7,8 millones de jóvenes más se encuentran desempleados, en un aumento de 4,6 puntos porcentuales entre 2008 y 2009.

«La incapacidad para encontrar empleo crea una sensación de impotencia e inacción entre los jóvenes que puede conducir a un incremento de la delincuencia, de los problemas de salud mental [...] y del consumo de drogas», dice el informe.

«Generación perdida»

«Los jóvenes ya no saben dónde ni cómo buscar empleo» , dijo Steven Kapsos, economista de la Unidad de Tendencias de Empleo de la OIT en Ginebra, donde se presentó el informe sobre Tendencias Mundiales del Empleo Juvenil 2010, con ocasión del lanzamiento del Año Internacional de la Juventud de Naciones Unidas.

El desalentador escenario hace que ya se hable de la «generación perdida», que denomina al «grupo de jóvenes desanimado que, después de una larga y frustrada búsqueda de empleo, se excluye del mundo laboral», explicó Sara Elder, economista de la OIT.

La cifra seguirá creciendo

Si los datos no son alentadores, el informe de la OIT advierte también de que la cifra continuará aumentando en 2011, a pesar de las expectativas de recuperación mundial. Además, el organismo pronostica una recuperación más lenta para el empleo juvenil que para el de adultos.

Malas condiciones laboraless

Según el estudio, en las economías en desarrollo, donde vive el 90 por ciento de los jóvenes, la juventud es más vulnerable al desempleo y la pobreza, por lo que la crisis se traduce en menor cantidad de horas trabajadas y en reducción de salarios para los pocos que pueden mantener un empleo formal.

«Los jóvenes de los países en desarrollo se emplean en actividades poco o nada remuneradas y se hacen cada vez más vulnerables», destacó Elder. En consecuencia, 152 millones de jóvenes , cerca del 28 por ciento de todos los jóvenes trabajadores en el mundo, trabajaron en 2008 pero permanecieron en la pobreza extrema .

«El resultado es que el círculo de la pobreza laboral persistirá, al menos, otra generación», dijo Kapsos.

En España se nota especialmente

Por su parte, la Unión Europea registró un aumento del 4,6 por ciento del desempleo juvenil en 2009, su mayor subida de la historia, y especialmente acentuada en países como España y Reino Unido, donde la crisis golpeó de forma especial al sector juvenil.

En España , la tasa de paro juvenil es de un 40,3% , según datos que se conocieron el pasado 30 de julio . Es el porcentaje más alto de toda la Unión Europea, por encima de Estonia (39,8%) y Letonia (39,5%).

Apostar por la educación

En una nota del informe, el director general de la OIT, el chileno Juan Somavia , aconseja a los gobiernos de todos los países deben centrarse en la educación con el fin de abordar la tendencia creciente. «Los jóvenes son el motor del desarrollo económico», dice Somavia.

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