Dos personas mueren por la ola de calor y otra permanece ingresada
Una mujer de 55 años y un joven de 24 han fallecido en Sevilla y Badajoz, respectivamente, mientras un obrero de Ciudad Real está en la UCI
El calor veraniego se acaba de cobrar sus dos primeras víctimas en España. Una mujer de 55 años ha fallecido hoy en Sevilla, mientras que un joven de 24 años lo hizo el miércoles en Villar del Rey (Badajoz). Además, un obrero de Ciudad Real permanece ingresado en la UCI del Hospital General de la capital desde la noche del miércoles por un golpe de calor.
El trabajador se encuentra en estado grave
El obrero, de 45 años, se mantiene estable dentro de la gravedad y será necesario que transcurran otras 24 horas para ver su evolución, según han informado a EFE fuentes del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM).
En el momento de sobrevenirle el golpe de calor, el obrero se encontraba trabajando en una obra en Valdepeñas, por lo que en un principio fue trasladado al Hospital Gutiérrez Ortega de dicha población ciudadrealeña, desde donde se le remitió al Hospital de la capital.
Una mujer de Sevilla es la segunda víctima de la ola
La Delegación Provincial de Salud en Sevilla informó este jueves de que una mujer de 55 años había fallecido en la localidad hispalense como consecuencia de un golpe de calor, según ha confirmado la encuesta epidemiológica realizada por la Administración sanitaria.
En concreto, Salud detalló que la muerte se ha registrado como consecuencia de las altas temperaturas registradas en los últimos días en Sevilla y la "falta de un aislamiento adecuado en la vivienda" de esta mujer, que ingresó por urgencias en el Hospital Virgen Macarena de la capital hispalense el pasado martes, 6 de julio, afectada por un fallo multiorgánico. La paciente, que además era diabética falleció la madrugada del miércoles al jueves en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro sevillano.
La primera víctima, un joven portugués
El miércoles falleció también un joven en la localidad pacense de Villar del Rey, presuntamente por un golpe de calor.
El varón, un joven portugués de 24 años que trabajaba en la depuradora de Villar del Rey, sufrió un desmayo mientras regresaba a la obra donde trabajaba, según ha dicho hoy el alcalde de la localidad, Eduardo Durán. El golpe de calor es la causa que más se baraja, pero hasta la publicación de la autopsia no se podrá confirmar nada.
Cuando el joven se notó indispuesto, fue trasladado a su domicilio y se dio aviso al Punto de Atención Continuada (PAC) de Alburquerque. El equipo sanitario del PAC se trasladó al domicilio del paciente, donde lo encontró inconsciente, con falta de pulso y respiración y temperatura corporal muy elevada, por lo que se avisó al 112 y se procedió a realizarle maniobras de resucitación cardio-pulmonar.
En ese momento se activó la unidad medicalizada con base en San Vicente de Alcántara que, a su llegada, confirmó que el paciente se encontraba en parada cardio-respiratoria, realizando medidas de soporte vital avanzado. Sin embargo, tras 45 minutos de maniobras de resucitación cardio-pulmonar, el equipo certificó su muerte.
El alcalde de Villar del Rey, Eduardo Durán, a explicado este jueves que no se "pudo hacer nada" para salvar la vida del joven. Al parecer, explicó el alcalde a Europa Press Televisión, otros compañeros también portugueses que trabajaban con el joven fallecido señalaron que éste ya se "sentía mal por la mañana" y "que no tenía fuerza", aunque luego se sintió mejor, si bien por la tarde volvió a tener problemas y tuvo lugar el fatal desenlace.
La primera ola de calor del verano
Estas dos muertes se encuadran en la primera ola de calor veraniega que sufre España. En algunas zonas de Extremadura, Castilla-La Mancha y Extremadura, los termómetros podían indicar cifras de más de 42ºC. Además, los 36 y 38ºC se alcanzarán en la zona centro, Castilla y León e incluso en áreas del interior de Galicia y del valle del Ebro.
La Agencia Estatal de Meteorología ha decretado alerta amarilla para 14 comunidades autónomas y la alerta naranja para varias zonas de Andalucía. Para mañana se espera que las temperaturas desciendan ligeramente.
Los golpes de calor, un problema todos los veranos
El golpe de calor es un síndrome grave que se produce por una exposición irregular a unas altas temperaturas. Así, el organismo no es capaz de controlar la temperatura corporal, de forma que sube la fiebre a más de 41 grados.
Los síntomas que hay que tener en cuenta son la temperatura del cuerpo, la alteración de la conciencia y la deshidratación. Por ello, la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía insistió este jueves en la importancia de evitar la exposición a las altas temperaturas, ya que pueden suponer una agresión importante para el organismo. Como medida preventiva, aconseja no hacer ejercicio en las horas centrales del día, permanecer en sitio fresco, a la sombra, y beber abundantemente agua.
Ante la aparición de un golpe de calor es preciso solicitar asistencia médica urgente. Mientras ésta llega, hay que colocar a la persona afectada en un entorno fresco y enfriarla con aire o agua fría, ya sea con una ducha, un baño o mojando sus ropas. Los deportistas, trabajadores expuestos al calor, bebés, personas mayores, discapacitados o enfermos crónicos son especialmente sensibles a las altas temperaturas.
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