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«Los psiquiatras son hoy un sustituto de los sacerdotes»

Juan Aparicio-Belmonte ha ganado el II Premio Bubok con su libro «Mis seres queridos», editado en formato digital

SERGIO DANIEL BOTE

Su primera novela se llamaba «Mala suerte», y sin embargo parece como si el título le hubiera servido para conjurar el destino, ya que desde entonces Juan Aparicio-Belmonte ha recibido varios premios. El último, el II Premio de Creación Literaria del portal en línea de autopublicación Bubok , por su libro «Mis seres queridos», que se ha editado primero en formato electrónico, y que en octubre saldrá previsiblemente en papel de la mano de la editorial Alfaguara . Para presentar «Mis seres queridos» al concurso, el novelista eligió como seudónimo «Superantipático». «Me hacía gracia -cuenta-, escoger algo así en vez de un sobrenombre con ribetes literarios, una especie de gesto teatral, histriónico».

La trama

«Me llama la atención el que es perdedor por pereza o por falta de voluntad»

La historia gira en torno a unos personajes contradictorios y nada ejemplares, y bajo la trama, narrada con un humor negro y políticamente incorrecto, subyace una profunda crítica social. La trama gira en torno a un psiquiatra infantil estafador, un empresario desequilibrado y la hija de éste, que acude al facultativo para que sane a su padre. «Los psiquiatras son hoy casi un sustituto de los sacerdotes», asegura el autor. Su personaje, en vez de tratar a los niños, los deja en un rincón mientras navega por internet o se toma un whisky. «No es un tipo malvado -explica Aparicio-Belmonte-. Es un tipo de malo que está en cierta medida permitido en la sociedad en que vivimos. Cubre las apariencias y lleva una vida cómoda sin cumplir con su profesión, como muchos en la vida real».

Tanto en «Mis seres queridos» como en su novelas anteriores, al autor le gusta confrontar a perdedores. «Me llama la atención, no el perdedor simpático, sino el que crea desasosiego, el que es perdedor por pereza o por falta de voluntad. Un tipo mezquino, vago, un individuo que tiene problemas para comportarse según sus propias convicciones de cara a los demás. Los conflictos de mis novelas se centran en esa contradicción en el comportamiento de los personajes. Algunas veces pueden ser ejemplares, pero al final siempre vuelven a decepcionar».

A pesar de que su obra ha salido al mercado en formato nativo digital, el novelista (nacido en Londres en 1971), se declara «fetichista del libro en formato tradicional». Aunque admite el potencial que posee este tipo de dispositivos como el iPad o el Kindle, asegura que «si me compro un libro y lo pierdo, puedo recuperarlo, pero si tienes un e-reader y lo pierdes, pierdes toda tu biblioteca, y el disgusto puede ser mayúsculo».

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