Por primera vez desde 1974, ninguna fuerza política ha logrado alzarse con mayoría absoluta. El recuento oficial de los votos de las elecciones generales celebradas este jueves dan la victoria al Partido Conservador de David Cameron, que logra 306 diputados en la Cámara de los Comunes, pero no alcanza los 326 diputados en los que se establece la mayoría absoluta.
Es lo que en este país se llama un "hung Parliament" (un Parlamento colgado), algo que no ha ocurrido desde 1974 y que, por lo tanto, abre un nuevo escenario político en el Reino Unido. Lo disputado de estos comicios resultó también en un alto índice de participación, que se situó en torno al 64 por ciento del electorado (unos 45 millones), nueve puntos por encima de las previsiones de los expertos demoscópicos.
Falta por conocer el resultado en una de las circunscripciones -Thirsk and Malton (norte de Inglaterra)- donde la elección se celebrará el 27 de mayo por la muerte de uno de los candidatos.
Al no haber llegado a los 326 escaños que marcan la hegemonía, el todavía primer ministro, Gordon Brown, continuará en el número 10 hasta que quede garantizada la formación de un Gobierno.
Los tories, que volvieron a ser la fuerza más votada del país, algo que no ocurría desde las elecciones de 1992, se ven obligados a gobernar en minoría, probablemente con el apoyo de otras fuerzas políticas, como los unionistas de Irlanda del Norte, que puede contribuir con el voto de ocho o nuevo parlamentarios, o pactar con otras fuerzas políticas.
El Partido Laborista del primer ministro Gordon Brown obtiene 258 parlamentarios y el Partido Liberal Demócrata de Nick Clegg 57, mientras que otros partidos se reparten 28 escaños.
«El laborismo ha perdido su mandato para gobernar»
Tras ganar su circunscripción, David Cameron consideró que los resultados preliminares de la cita de ayer dejaban "claro" que, tras 13 años en el poder, el Laborismo "perdió el mandato" para continuar gestionando un país que, según él, precisa un "nuevo liderazgo" que él mismo se ofreció a garantizar. "Este país, nuestro país, quiere cambio".
Tanto Brown como Cameron regresaron a Londres después de participar en sus respectivos distritos electorales en el escrutinio y en la proclamación de sus escaños, y se reunieron con militantes de sus partidos a la espera de que concluya el recuento. Brown, que también hizo una breve declaración en su distrito de Escocia, subrayó que todo sigue en el aire.
El líder liberaldemócrata, Nick Clegg, que fue la gran estrella de la campaña electoral después del primer debate televisado entre los tres candidatos a primer ministro y llegó a situar a su partido como segunda fuerza en los sondeos sobre intención de voto, fue el gran derrotado en las urnas, al lograr sólo 51 escaños. No obstante, tiene ahora la llave para la formación de un Gobierno que disponga de un respaldo parlamentario suficiente. Clegg declaró que a partir de este momento «lo mejor es que todos nos tomemos un tiempo para que la gente tenga el buen Gobierno que merece en estos momentos tan difíciles e inciertos», y reiteró: «no debemos precipitarnos en la toma de decisiones».
| Candidato | Escaños | Porcentaje |
|---|---|---|
| Cameron | 297 | 36,1% |
| Brown | 253 | 29,3% |
| Clegg | 53 | 22,9% |


