El pasado viernes se aprobó la segunda remesa de proyectos del Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad local, ese plan que según Manuel Chaves iba a marcar el despertar de la Economía Sostenible en España, y que de acuerdo con las tesis de Zapatero supondrá la renovación del modelo productivo de la economía española.

Sin embargo, en esta segunda tacada -571 proyectos de inversión y 137 programas sociales- el modelo sigue siendo el mismo que tanto han denostado los socialistas: ladrillo, cemento y más ladrillo. Por cada iniciativa que tiene algo que ver con la sostenibilidad, las energías renovables o la innovación, se han dejado pasar decenas relacionadas con la construcción, principalmente obras menores.

Se echa en falta la presencia de algunos clásicos del anterior Plan E o de la primera remesa, como son los cementerios o las pistas de pádel. En esta oportunidad sólo hay dinero para un camposanto y para cuatro propuestas «padelísticas». Las mejoras en el cementerio de La Llosa (Castellón) que se embolsará 71.947,18 euros. En su lugar el relevo lo han tomado los campos de balompié. Ya sea en solitario como en Pantoja (Toledo), donde se van a gastar 370.484 euros. O en combinación con otras prácticas deportivas como ocurrirá en Granada. 872.925,24 euros para el fútbol, el pádel y una pista de atletismo en el Cerrillo de Macarena.

Rehabiltaciones de fachadas, reconstrucciones, pavimentaciones o renovación de las redes de alcantarillado, agua potable o del alumbrado se llevan la palma junto, curiosamente, a la instalación de ascensores en dependencias municipales como en Urda (Toledo) 18.560 o en Sobradiel (Zaragoza), donde se gastarán 96.235,90 euros.