Se aprueba la pasarela peatonal entre la zona del Beatriz y Buenavista

El propio alcalde, Emiliano García-Page, fue el encargado de anunciar ayer que la Junta de Contratación del Ayuntamiento de Toledo había aprobado el proyecto técnico, por valor de aproximadamente 1,1 millones de euros, de la pasarela peatonal que unirá el entorno de los hoteles Hilton y Beatriz con la Ronda de Buenavista sobre la variante de la capital, una infraestructura que según la primera autoridad local se va a convertir en «una seña de identidad de la que nos sintamos orgullosos».

Y es que el alcalde aprovechó la ocasión para, de paso, criticar el urbanismo de años anteriores, y en concreto de las zonas que unirá la futura pasarela, «un ejemplo claro del pésimo urbanismo reciente de la ciudad». Por contra, García-Page apuntó que tanto esta pasarela como la que también se construirá para comunicar la zona industrial y residencial del Polígono de Santa María de Benquerencia son unas claras apuestas y prototipos de una imagen «más moderna e innovadora de la ciudad», y «un signo de que las cosas cambian y van a cambiar más en el futuro».

Corregir un mal urbanismo

Una vez aprobado el proyecto, el primer paso va a ser la redacción técnica del mismo, con un coste de 50.000 euros, convirtiéndose así en uno de los objetivos a financiar el año que vienen en los distintos proyectos de inversión. La futura pasarela, que se completará con un camino peatonal, servirá para el desarrollo urbanístico y la vertebración urbana que se tenga que hacer en la zona.

«Me alegra la noticia porque los vecinos la demandan claramente y porque corrige lo que a mi juicio es una muy mala planificación urbanística, ya que haber realizado zonas incomunicadas o con déficit de comunicación es consecuencia de una muy mala planificación urbanística que necesita de remedios y nuevas estrategias para una ciudad que empieza a tener una imagen nueva», argumentó.

García-Page insistió en que la nueva pasarela, junto con la que se hará sobre la carretera N-400 para unir la zona industrial y residencial del Polígono y otras actuaciones de este tipo, serán «el contrapunto del siglo XXI a los puentes romanos de la ciudad; no queremos puentes como otros que existen en Toledo, sino con identidad e imagen propias, que aporten valor arquitectónico a la ciudad y que sean nuevas referencias».

El alcalde relacionó estas estructuras modernas a otras también significativas proyectadas para los próximos años como el futuro Barrio Avanzado, una iniciativa «innovadora que servirá para que nos visiten para conocerla; tendremos puentes como estos y edificios novedosos como los que se están levantando en la calle Dinamarca», destacó el alcalde como ejemplos del nuevo sello urbanístico que pretende imprimir con el desarrollo del POM a la imagen visual de la ciudad.