Rickie Lee Jones, la emoción verdadera

Sin trabajo no hay talento. Parten los artistas de sus experiencias y de su voluntad para estilizar la realidad, potenciar la percepción y darle sentido a la existencia (o negárselo). Angélica Liddell cree que su sangre vertida en escena añade un plus de verdad a ... su teatro: se equivoca, y se desliza por un peligroso camino de destrucción. La cantautora estadounidense Rickie Lee Jones, que ha vivido la vida a grandes sorbos, sigue exigiéndose al máximo y demostrando que los caminos de la música son infinitos. Pletórica de voz, a la guitarra y al piano, y acompañada de los prodigiosos Sal Bernardi (guitarras) y Rob Wasserman (contrabajo), capaces de sonar como una orquesta, el miércoles ofreció un concierto de salvaje dulzura, de una emoción tan destilada como verdadera.