Westerwelle, de azote de la gran coalición a vicecanciller de Merkel
El jefe del Partido Liberal (FDP), Guido Westerwelle, celebra el resultado electoral de su partido./ Efe
Actualizado Martes, 29-09-09 a las 08:13
Los votos de los alemanes han devuelto al partido liberal (FDP) a su puesto natural de aliado de la Unión Cristianodemócrata (CDU), impulsado por el brío de su líder, Guido Westerwelle, y por la grave crisis interna de los socialdemócratas. Westerwelle, que actuó en los últimos cuatro años como azote de la gran coalición, ha sacado al FDP del ostracismo parlamentario y llevado a formar parte del nuevo Gobierno de Angela Merkel.
La imagen de Westerwelle se ha consolidado dentro y fuera de su partido en los años del dique seco de la oposición en los que ha conseguido revertir su imagen de 'yupi' superficial de la época en la que recorría el país a modo de estrella de rock a bordo del "Guido-móvil". La crisis económica y las concesiones que Merkel realizó durante la última legislatura a sus socios socialdemócratas han aupado al FDP, revitalizado por su líder, como opción política preferida del elector conservador y empresario, desencantado con la política de la Unión.
Como líder indiscutible de su partido, Westerwelle se ha desprendido de las rémoras de su época más frívola, que le llevó a prodigarse constantemente en programas televisivos con zapatos y camisetas con el lema "18", el porcentaje de votos que esperaba obtener en las siguientes elecciones. No el 18 sino cerca del 15% de los votos ha obtenido su partido, la cifra más alta de toda su historia.
Las aspiraciones de Westerwelle
El líder liberal tenía dos aspiraciones en estas elecciones: finiquitar la gran coalición y ser el nuevo ministro de Exteriores de Alemania. Las urnas le han concedido su primer deseo; de las negociaciones postelectorales dependerá que se cumpla el segundo. El cargo que se ha asegurado ya es el de vicecanciller, puesto que tradicionalmente ocupa en Alemania el líder del partido "pequeño" que se alía en coalición con otro más votado.
La defensa de una masiva bajada de impuestos como salida de la crisis ha marcado su mensaje político, así como sus constantes diatribas a la labor de la gran coalición. De verbo fácil e ironía afilada, Westerwelle lideró durante cuatro años a la oposición del Parlamento alemán, puesto que ocupará el hasta ahora ministro de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier.
Nacido en 1961 y jurista de profesión, Westerwelle presidió las juventudes liberales entre 1983 y 1988 y seis años después accedió al puesto de secretario general. Fue en 2001 cuando ocupó la presidencia de la formación y un año después se postuló como candidato. El renovado Westerwelle también ha querido alejar a su partido de su tradicional papel como representante de las clases pudientes y ha insistido por activa y por pasiva en que el FDP lucha por la clase media, atenazada por los impuestos.
Su homosexualidad en segundo plano
A diferencia de otros políticos alemanes, Westerwelle mantuvo durante años su homosexualidad en un discreto segundo plano, pese a que 'soto voce' era sabido que convivía con otro hombre desde hacía años. No como el actual jefe del Gobierno regional de Berlín, el socialdemócrata Klaus Wowereit, quien anunció a los cuatro vientos en un acto de su partido que era homosexual cuando aún era candidato a gobernador de la capital alemana.
Westerwelle no se ha pronunciado nunca en público sobre esa cuestión pero, ya como líder del partido liberal, empezó a acudir a actos públicos con su pareja Michael Mronz, y es tradicional su asistencia al festival de ópera de Bayreuth (sur de Alemania) dedicado al compositor alemán Richard Wagner. La alianza política de FDP y CSU perfilará dúo gubernamental insólito en Alemania e integrado por una mujer del partido conservador y un homosexual, como segundo de a bordo, por parte del los liberales.

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