Tensión a la llegada del ex novio de Laura Alonso a los juzgados de Orense

Desde últimas horas de la tarde, un grupo de personas, especialmente jóvenes, se concentró ante los juzgados orensanos, donde profirieron insultos contra el presunto autor de la muerte de la joven, vecino de la víctima.

Al lugar fueron desplazados grupos antidisturbios, que custodiaron la entrada del furgón que trasladaba al detenido, mientras los vecinos de Toén y los amigos de la chica gritaban: "Hijo de puta" o "asesino".

Algunos amigos de la joven llevaron hasta las puertas del juzgado una imagen de Javier Cruz, para expresar su convicción de que es el asesino de la joven.

El detenido estuvo desde el domingo a mediodía en las dependencias de la Comandancia de la Guardia Civil de Ourense, donde ya había testificado en dos ocasiones anteriores como testigo.

Antes de que se encontrase el cuerpo de Laura, cuya desaparición había denunciado su familia al no regresar el lunes de la pasada semana después de tomar algo con sus amigos, había negado su vinculación con la muerte de la muchacha.

Sin embargo, esta tarde, el hombre se derrumbó y acabó confesando el crimen tras horas de interrogatorio, según habían apuntado esta tarde fuentes de la investigación.

La joven fallecida había mantenido una difícil relación con Javier Cruz, contra quien había presentado en 2007 una denuncia por maltrato, si bien luego la había retirado.

El cuerpo de la chica apareció en la tarde del pasado sábado tras seis días de búsqueda, en un sitio ya rastreado por un centenar de fuerzas de seguridad, voluntarios, vecinos y amigos.

Antes, se habían encontrado su coche, cerrado y sin signos de haber sido violentado, al igual que un teléfono de Laura, sin tarjeta ni batería, tras lo que, lejos de allí, una joven dio con su chaqueta.

La autopsia practicada al cuerpo de la chica, cuyas conclusiones no han sido reveladas porque el caso está bajo secreto sumarial, ha concluido y se ha autorizado su entierro mañana por la tarde.