Actualizado Miércoles, 10-06-09 a las 03:10
La victoria de los partidos conservadores en las elecciones europeas abren el camino para un nuevo mandato del presidente de la Comisión, José Manuel Barroso (cuyo mandato acaba en noviembre), a pesar de las críticas. Según las primeras estimaciones a la salida de las urnas hoy, confirman que la victoria de las formaciones de centro-derecha podrían asegurarle el puesto al ex primer ministro portugués al ser la fuerza política dominante en la Eurocámara.
La única opción de constituir un frente anti-Barroso para la izquierda europea era obtener un buen resultado hoy. Y no ha sido así. Los partidarios entre los socialidas de una alternativa al actual presidente de la Comisión -que fue militante maoista en su juventud y ahora es un convencido liberal- no han podido cumplir su objetivo por las divisiones internas.
Ocho ex dirigentes socialistas (entre ellos el ex presidente español Felipe González) pidieron el martes en una carta abierta una alternativa a Barroso, pero tres jefes de gobierno de la izquierda como José Luis Rodriguez Zapatero, el portugués José Socrates y el británico Gordon Brown siguen apoyando a Barroso.
Una victoria para la UE, dice Barroso
Barroso ha considerado hoy que las elecciones a la Eurocámara han supuesto una "innegable victoria" para los partidos que apoyan el proyecto europeo, tras unos resultados favorables a los conservadores que afianzan su próxima reelección. La preponderancia de los eurodiputados del Partido Popular Europeo (PPE) en la próxima cámara da un nuevo impulso al segundo mandato de Barroso, que no obstante también necesita el apoyo de los socialdemócratas.
Barroso ha considerado hoy que las elecciones a la Eurocámara han supuesto una "innegable victoria" para los partidos que apoyan el proyecto europeo, tras unos resultados favorables a los conservadores que afianzan su próxima reelección. La preponderancia de los eurodiputados del Partido Popular Europeo (PPE) en la próxima cámara da un nuevo impulso al segundo mandato de Barroso, que no obstante también necesita el apoyo de los socialdemócratas.
De momento, para su designación por el Consejo Europeo el portugués ya cuenta con el respaldo de gobernantes socialistas como el español José Luis Rodríguez Zapatero o el británico Gordon Brown.
Tras las elecciones europeas, la reacción oficial de Barroso ha sido felicitar a todos los partidos y candidatos que "apoyan el proyecto europeo y que quieren ver a la Unión Europea (UE) responder a sus problemas cotidianos".
"Las fuerzas políticas que trabajaron de manera constructiva con la Comisión durante la última legislatura ocuparán una aplastante mayoría de los escaños en el próximo Parlamento Europeo", afirmó en un comunicado.
"Las fuerzas políticas que trabajaron de manera constructiva con la Comisión durante la última legislatura ocuparán una aplastante mayoría de los escaños en el próximo Parlamento Europeo", afirmó en un comunicado.
Pero también consideró que en comparación con los comicios de 2004, las elecciones han mostrado que "no es el momento de la complacencia". Por ello, pidió a los políticos, cuyos debates "raramente" superan el nivel nacional, que pasen a considerarse también actores europeos. Para el luso, "a partir de hoy, Europa debe demostrar de nuevo a los electores que es capaz de ofrecer resultados, y mostrar la vía para superar la crisis económica y financiera".