A estas alturas de la campaña, el desembarco de altos cargos y mandamases de los partidos en Galicia se ha convertido en una invasión en toda regla. Las estrecheces de las encuestas y el ascenso en intención de voto del PP están animando la participación de los líderes de los dos partidos nacionales en liza. Y, en ocasiones, no hay sitios para todos: José Blanco y Alberto Ruiz Gallardón se cruzaban ayer en el casco viejo de Lugo. No les quedó más remedio que desearse suerte. «En lo personal, que no en lo político», decía el alcalde de Madrid al socialista. «Si me va bien a mí, probablemente también te vaya bien a ti», respondía el cocinero de Ferraz.

Las direcciones centrales de los partidos se han empeñado en sacar músculo en Galicia. El sábado 14, día en que el Partido Popular reunía a 12.000 personas en la Plaza de Toros de Pontevedra —en el que fue y será su acto de campaña más multitudinario—, el PSOE diseminó por el territorio galaico al ex presidente Felipe González; la secretaria de Organización, Leire Pajín; y los ministros Alfredo Pérez Rubalcaba, César Antonio Molina y Elena Espinosa. Los populares tenían la baza de la que ha sido, por ahora, la única aparición de Fraga en Galicia.

El caso de Mariano Rajoy es paradigmático. El presidente del PP dejará de pisar Galicia sólo en tres días de la campaña gallega. No estuvo, por ejemplo, el pasado domingo, que pasó en el País Vasco.

Pongamos un ejemplo: al inicio del pasado día 18, quinta jornada de campaña, Touriño tenía su contador particular —en la prensa local, los candidatos compiten incluso en distancias recorridas— en poco más de 1.100 kilómetros (esa mañana se levantó líder Núñez Feijóo —PP—, con poco menos de 1.500). Esa misma jornada, tras la sesión de control en el Parlamento de la mañana, Rajoy azuzó al chófer y cubrió más de la mitad del total del presidente en un periplo por el interior de Orense: O Barco de Valdeorras, Rubiá, Esgos, O Carballiño... Además de Rajoy, han estado en la Comunidad María Dolores de Cospedal, Soraya Sáenz de Santamaría, Gónzález Pons, Ruiz Gallardón, o Ana Pastor, entre otros.<MC1>

El esfuerzo del PSOE por apoyar al actual ejecutivo autonómico —por lo menos, a su ala socialista— se escenificó el pasado día 2 de febrero, cuando hollaban suelo gallego en una misma jornada hasta cinco ministros del ejecutivo de Zapatero. Veinticuatro horas después de la visita a Vigo de Cristina Garmendia (Ciencia e Innovación), los titulares de Defensa, Cultura, Sanidad, Fomento y Medio Ambiente se repartieron en La Coruña y Lugo.