Nacen tres crías de oso pardo en los Pirineos

Pero serían necesarios 40 ejemplares más para asegurar la supervivencia de la especie en la zona, según los expertos.
Una hembra de oso pardo con sus dos crías, de paseo por la sierra palentina
Expertos franceses y guardias forestales del Consejo General de Aran tratan de confirmar el nacimiento de tres nuevas crías de oso pardo en los Pirineos durante el invierno. Si el dato es bueno, el número de ejemplares superaría los veinte y supondría un «éxito destacable» dentro del programa de reintroducción del animal en la zona.
Según ha informado la entidad ecologista Depana, a finales de junio un grupo de personas observó durante diez minutos a una hembra con dos cachorros en las montañas del municipio francés de Couflens -al norte de Esterri d'Àneu (Lérida)-.
Las crías serían hijos de la osa Caramelle, nacida en el Pirineo en 1997, o bien de una de sus hijas, nacidas en 2002. Asimismo, técnicos de Depana observaron en julio las huellas de otra hembra acompañada, como mínimo, de un cachorro.
El análisis de las muestras biológicas de ambos avistamientos determinará si se trata de los mismos ejemplares o no. De confirmarse el nacimiento de otros tres, la especie habría ganado cinco nuevos miembros en los últimos dos años.
Ganado vigilado
En la actualidad, se calcula que existen entre 20 y 25 osos pardos en el Pirineo, subdivididos en tres zonas, de las que solo el núcleo central es reproductor, pues concentra hembras.
Los expertos consideran que el futuro de la especie pasa por doblar su población hasta los 40 ejemplares. El plan inicial de reintroducción del oso en la cordillera pirenaica, apoyado por los Gobiernos francés y español, provocó numerosas críticas y protestas de los ganaderos. Desde principios de julio, unas 35.000 cabezas de ganado, entre ovejas y cabras, pastan agrupadas y vigiladas por pastores en el Pirineo leridano para evitar posibles ataques.
El oso pardo sobrevive en la actualidad gracias a la reintroducción de ocho animales procedentes de Eslovenia liberados en 1996, 1997 y 2006. Según Depana, la secretaria de Estado de Ecología de Francia, Chantal Jouanno, ha anunciado que durante 2011 se liberará una nueva hembra en la zona del Baearn, en el Pirineo occidental.
Población oriental en peligro
Desde 1989 se lleva a cabo un conteo de esta especie en peligro de extinción. Se ha comprobado una recuperación esperanzadora en la subpoblación occidental, (León y Asturias), donde se estima que existen 140 ejemplares -frente a los 120 que estaban censados hasta ahora-. En la zona oriental (Palencia, Cantabria), la situación es más grave, aunque permanece estable. En la actualidad hay registrados 30 ejemplares, comenta José Luis García Lorenzo, coordinador de proyectos de la Fundación Oso Pardo.