Comillas acogía ayer el encuentro bilateral España-México en el que destacó un acto muy simbólico: el intercambio de estandartes. España entregaba el estandarte que incautó a los insurgentes en la independencia, la primera bandera mexicana.En el acto hubo anécdota incluida. Revilla, se llamaba el primer pueblo que fundó un cántabro en las primeras expediciones en el siglo XVI. El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, comentaba la coincidencia con tono festivo.Más tarde, la economía y el plan de ajuste del déficit del presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, volvían a centrar la jornada.El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, respaldaba los recortes anunciados por Zapatero, porque son "valientes" y "no hay otra opción".Van Rompuy se manifestaba así en la rueda de prensa posterior a la Cumbre Unión Europea (UE)-México.