Paseaban en bicicleta, y oyeron algo. Padre e hija pensaron en un gato porque el sonido salía de una alcantarilla, pero era un bebé. Ha ocurrido en Australia. Su madre ha sido localizada y le espera una larga temporada en la cárcel. Para rescatar al bebé necesitaron movilizar seis personas para mover la pesada losa. Bajo ella, estaba el bebé, seriamente deshidratado. Y es que podría haber pasado allí varios días, a temperaturas que superaron los 40 grados. Gracias a la manta que lo cubría, han sido capaces de localizar a su madre, que ya ha sido arrestada y acusada de intento de asesinato. Sin posibilidad de fianza. Mientras el pequeño se recupera en un hospital en estado grave pero estable. -Redacción-
