La situación entre los manteros y las fuerzas de seguridad de las ciudades españolas es más tensa que en mucho tiempo. La muerte del senegalés Mor Sylla la semana pasada durante un registro en Salou reavivó el conflicto, y ha trasladado al primer plano esta problemática social que lleva en España varias décadas. Los vendedores ambulantes se ven obligados a comprar la mercancía por adelantado, y venderla con un margen de beneficio mínimo. De esta forma, cada vez que hay una redada defienden su inversión como pueden: huyendo u ofreciendo resistencia.