De invitado en la proclamación de Felipe VI, a espía del CNI, a presentador de actos de Aznar en Faes, o a alto cargo del Gobierno. A Francisco Nicolás Gómez no se le ponía nada por delante a la hora de codearse con las élites. Pero al final sus mentiras le han costado una noche de calabozo y una imputación por estafa. El joven se hizo pasar por un alto cargo del gobierno y ofreció un informe falso a su víctima, que le pagó 25.000 euros. Tras prestar declaración en los juzgados madrileños, ha sido puesto en libertad provisional.