Los cementerios más monumentales de España
El beso de la muerte, obra creada en los talleres del escultor Jaume Barba en 1930. Esta escultura, en concreto, es un trabajo de uno de sus operarios, Joan Fontbernat - ferrán pestaña

Los cementerios más monumentales de España

La visita a los cementerios el Día de Todos los Santos es una tradición arraigada. Una ruta por camposantos singulares

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La visita a los cementerios el Día de Todos los Santos es una tradición arraigada. Una ruta por camposantos singulares

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  1. Cementerio de Poblenou, Barcelona

    El beso de la muerte, obra creada en los talleres del escultor Jaume Barba en 1930. Esta escultura, en concreto, es un trabajo de uno de sus operarios, Joan Fontbernat
    El beso de la muerte, obra creada en los talleres del escultor Jaume Barba en 1930. Esta escultura, en concreto, es un trabajo de uno de sus operarios, Joan Fontbernat - ferrán pestaña

    Los cementerios son también lugares monumentales que merecen una visita y no solo en esta época. Varios de ellos están dentro de una Ruta Europea de Cementerios, reconocida por la Organización Mundial del Turismo por ser patrimonio histórico y artístico. Ahora se ha puesto de moda organizar visitas guiadas con folletos para explicar los panteones y se ha creado una Asociacion Europea de Cementerios que distigue varios españoles como «singulares». sobre todo en Asturias, Cantabria, País Vasco, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía.

    Barcelona

    Cataluña es la región con más cementerios singulares -hasta nueve- de los que ocho se sitúan en la provincia de Barcelona. El más interesante es el de Poblenou, el primero que se contruyó en la Ciudad Condal fuera del recinto amurallado. Inaugurado en 1775, destruido por las tropas napoleonicas y reconstruido en 1819. Destaca el monumento funerario El Beso de la Muerte obra de Joan Bonbernat (1930), el mausoleo dedicado a las victimas de la fiebre amarilla de 1921, y los panteones modernistas de Estanislau Planàs (obra del arquitecto Sagnier) o el neogotico de Juan Niqui (obra del escultor Vallmitjana). Otros camposantos en esta lista son el municipal de Vilanova i la Geltrú (estilo modernista), el de Sant Sebastià, en Sitges (panteones de “indianos”), el de Igualada (premio FAD de arquitectura en 1992), el de Vilafranca del Penedés, y el de Mataró.

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  2. Sacramental de San Isidro, en Madrid

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    La Sacramental de San Isidro (o Cementerio Viejo), es el segundo cementerio que se construyó (en 1811) y el primero fuera del casco urbano). Está declarado Bien de Interés Cultural. Destaca (en el patio de la Concepción) el mausoleo de la Familia Guirao, obra póstuma de Agustín Querol considerado por muchos como la obra cumbre del modernismo español, el panteón de alejandro Lassalle (obra de José Marín), o el Panteón de Hombres Ilustres (obra de Joaquín de la Concha). Hay visitas guiadas.

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  3. Cementerio de San José, Granada

    El municipal de San José es un monumento histórico dentro del recinto de La Alhambra, en la Dehesa del Generalife. Está en la lista de Bienes de Interés Cultural de la ciudad de Granada. Posee restos del palacio de los Alixares (siglo XIII) y en el destacan los panteones con esculturas funerarias de la Familia López Ruiz (obra de Nicolas Prados), de Melchor Almagro (de Agustín Querol) y de Miralles (Navas-Parejo).

  4. Cementerio de Polloe, San Sebastián

    polloe

    Conocido como el Cementerio de Polloe es el más importante de Guipúzcoa y debe su nombre al caserío donde se levantó en 1878, trasladándose a el las tumbas de otros cementerios. Entre sus panteones destaca el dedicado a la memoria de los personajes que figuran en el acta de Zubieta, correspondiente a la reunión mantenida por los supervivientes de la hecatombe del 31 de agosto de 1813, en la que se recoge el acuerdo de reedificar San Sebastián (obra de José de Goikoa). En el descansa Clara Campoamor.

  5. Comillas, Cantabria

    javier lastras

    El de Comillas está situado sobre una iglesia del siglo XV convertida en camposanto. En 1893 se hizo una ampliacion encargándosela al arquitecto modernista Lluís Domènech i Montaner que conservó las antiguas ruinas y levantó una fachada de acceso (declarada Bien de Interés Cultural) y relizo varios mausoleos. Uno de ellos, obra del escultor Josep Llimona, es el famoso Ángel Exterminador (1894), en lo alto sobre las ruinas del antiguo templo; con la espada en una mano y las alas extendida parece proteger las tumbas del cementerio. Rodeado de un muro de piedra, y rematado por pináculos decorados con cruces, en el abundan esculturas de ángeles y motivos religiosos.

  6. Cementerio General de Valencia

    Cementerio General de Valencia
    Cementerio General de Valencia - eduardo manzana

    El Cementerio General se construyó en los primeros años del siglo XIX y fue arrasado por los franceses. Debido a la gran cantidad de palmeras era conocido como el Hort de les Palmes, las cuales fueron cortadas para construir los panteones a partir de 1886. Destacan el Mausoleo de Juan Bautista Romero (el primero que se levantó), de Sebastián Monleón, con bellas alegorías a la muerte (reloj de arena con guadaña), el alma (antorcha apagada), resurrección (corona de siemprevivas) y eternidad (serpiente enroscada); el de Virginia Dotres (1853), de Vivelli Benedetto, que se trajo pieza a pieza de Italia; y los de las Familias White y Llano (1858), Bertrán de Lis, y Moroder. Tambien se encuentran aquí las tumbas de Blasco Ibáñez y Joaquín Sorolla.

  7. Cementerio de Derio-Bilbao

    mario martí

    Situado en Derio, alberga uno de los principales grupos de arte funerario de España y es reflejo de la época dorada del arte del País Vasco (finales del XIX y principios del XX). El folleto plantea un paseo, de una duración aproximada de una hora, por los los panteones, capillas y mausoleos más significativos, como el Panteón de Doña Casilda de Iturrizar. Muchos de los monumentos son obras de importantes artistas: escultor Quintín de Torre, o los arquitecto José María Basterra, o Mario Camiña.

  8. Monturque, Córdoba

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    Está también en la Ruta Europea de los Cementerios formando parte de la lista de la Asociación de Cementerios Singulares Europeos. La novedad de este camposanto reside en las cisternas romanas que con aspecto de chimenea fueron descubiertas en 1885 y que sirvieron en un principio para la recogida del agua de lluvia. Entre ellas destaca la conocida como la Gran Cisterna. Está declarado Bien de Interés Cultural y tiene vistas espectaculares sobre la Campiña y las sierras subbéticas. En el lugar hay un centro de interpretación. Del 31 de octubre al 3 de noviembre hay conferencias y exposiciones, destacando «El sueño de la Muerte en la Antigüedad».

  9. Elche, Alicante

    la verdad/asociación fotográfica

    Construido a principios del siglo XIX (1811) es conocido como el cementerio viejo. A través de sus panteones y edificios se descubre la coexistencia de diversos estilos como el neoclásico, el neomudéjar, el neorrománico o el neogótico. Incluso, debido a su posterior ampliación, hay muestras de arquitectura y esculturas modernistas o art decó. Destacan la tumba de Pedro Ibarra, el panteón de José Ferrández y el mural (declarado monumento) dedicado a los fusilados de 1939 y 1940.

  10. Cementerio de San Fernando, Sevilla

    El de San Fernando, inaugurado en 1852, destaca por sus palmeras y por las tumbas, mausoleos y monumentos funerarios de conocidos toreros como Francisco Rivera «Paquirri», Juan Belmonte «El Pasmo de Triana», Manuel García «El Espartero», Gitanillo de Triana... pero el más impresionante es el de Joselito, de Mariano Benlliure, hecho en mármol y bronce que reproduce el entierro del torero; en el mismo mausoleo reposan también los toreros Ignácio Sánchez Mejias (cuñado de Joselito) y Rafael Gómez Ortega «El Gallo». Tambien los hay de artistas como Juanita Reina, Antonio Machín, Tomás Pavón o Manuela Vargas. Otro mausoleo rodeado de leyendas y que impresiona es el Cristo Crucificado de Las Mieles, obra de Antonio Susillo que esta enterrado a sus pies; su nombre se debe a que tuvo en su boca durante un tiempo un panal de abejas.

  11. Avilés, Asturias

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    Cementerio municipal de La Carriona. Su origen se remonta a finales del siglo XIX y está repleto de esculturas de relevancia artística y cargadas de alegorías que lo convierten en un museo al aire libre. En el reposa el escritor Armando Palacio Valdés

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