Fitness
SUP Yoga: La última tendencia fit de California
El yoga se reinventa sobre una tabla de surf para esculpir la figura este verano donde quiera que haya agua
Se aproxima el verano y las costas se convierten en el escenario de momentos inolvidables, por este motivo desde hace una temporada el surf y el yoga se han convertido en un todo. Este lifestyle californiano ha estado extendendiéndose por el mundo entero gracias al cambio positivo sobre el cuerpo y la mente de quienes lo practican.
La experiencia deportiva empezó a ponerse de moda en San Diego basándose en la combinación de posturas de yoga sobre una tabla flotando en el agua; en vez de realizar los diferentes asanas sobre la colchoneta tradicional en el suelo.
La filosofía principal es conectar con el mar , sentirse parte del ritmo de algo más inmenso como la naturaleza viva en el suave mecer de las olas.
El SUP Yoga es la complementación perfecta para mejorar nuestro equilibrio , el cual se enfoca principalmente en el tronco. La fuerza abdominal se desarrolla para ejecutar cada una de las posturas milenarias sobre esta tabla de surf .
Las sesiones suelen ser de 90 minutos aproximadamente, en las que se inicia con asanas sencillos para calentar el cuerpo sobre la arena y luego darle entrada a cada uno de los movimientos del Hatha Yoga tradicional. Finalmente se termina tumbado boca arriba en la tabla dejándose mecer.
Los beneficios se notan desde las primeras sesiones: Se aumenta la fuerza, la flexibilidad, la coordinación, la resistencia, la concentración, la serenidad y además de vencer a cada uno de tus miedos.
Para aquellos que practiquen surf esta nueva disciplina les ayuda a trabajar sobre sus niveles de ansiedad . Aumenta la capacidad pulmonar , la concentración , el fortalecimiento de la musculatura entre otras cosas para enfrentarse a las olas más críticas .
Esta experiencia casi mística busca reconciliar nuestro cuerpo con el elemento del agua, el cual está ligado a las emociones , los instintos , el pensamiento y el inconsconsciente.
Digamos que el verano tiene una magia muy particular que no solo nos saca una invasión humanoide a las terrazas, o broncearnos cual lagartos ultravioletas durante horas. El deporte se convierte en pasión y en razón de existir en nuestro tiempo libre.
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