Las subastas más personales de Christie's

Las joyas de Elisabeth Taylor. Las joyas de la protagonista de «Cleopatra» causaba auténtica fascinación, por eso antes de caer el martillazo definitivo se expusieron en Londres, Moscú, Los Ángeles, Dubai y Génova durante meses. En la imagen, la actriz posa con «La peregrina», una perla de formas extrañas descubierta en el Golfo de Panamá en 1579 que durante siglos fue una de las más importantes joyas de la corona española. Luego pasó a manos de James Hamilton, marqués de Abercorn «La peregrina», Elisabeth Taylor y Cartier. La exótica perla llega a las manos de Taylor cuando su entonces marido, Richard Burton, la adquirió en una casa de subastas en 1969, a partir de ese momento se convirtió en imprescindible para la actriz. Para la película «Ana de los mil días», Taylor se alió con Cartier para incluir la histórica perla en un collar de diamantes, el espectacular resultado puede comprobarse en la imagen Elízabeth Taylor, «Taj Mahal». El diamante en forma de corazon conocido como «Taj Mahal» habia sido un regalo del emperador mogol Shah Jahangir a su hijo. Burton lo engastó en una cadena de oro y rubi de Cartier y se lo entrego a la actriz en su cuarenta cumpleaños. Veinticuatro de las ochenta joyas subastadas de Taylor superaron el millón de dólares (750.000 euros) y tres de ellas superaron los cinco millones (3'5 millones de euros. En la subasta diurna y por internet las ventas alcanzaron la cifra de 150 millones de dólares, una cifra sin precedentes para una colección privada de joyería El arma con la que Verlaine disparó a Rimbaud. Una de las historias de amor más tormentosas que se recuerdan. Suscita especial devoción entre los amantes de la literatuera francesa -y universal- es la que compartieron los literatos simbolistas. Fue un escándalo en la época. Verlaine, casado y padre de familia, abandonó el hogar arrastrado por los sentimientos hacia un joven Rimbaud, que era apenas un adolescente. En uno de sus frecuentes arrebatos viscerales, Verlaine disparó a su amante con la pistola subastada, que adquirió un valor de 434.000 euros Lady Di, el vestido con el que bailó con John Travolta. La joya de terciopelo azul que lucía la «reina de corazones» la noche en la que bailó con el protagonista de «Grease» fue adjudicada por una cuantía de 278.400 euros. El diseñador que hizo posible esta pieza sensual y elegante fue el británico Víctor Edelstein, Diana Spencer la eligió para una cena con Ronald Reagan en la Casa Blanca en 1985 El vestido del «Cumpleaños feliz» de Marilyn Monroe. En una de sus últimas apariciones públicas, la actriz entonaba el «Happy Birthday» para el presidente de los Estados Unidos, John F.Kennedy ante más de 15.000 personas. Corría el año 1962 y el momento quedó registrado en las instantáneas, grabaciones y retinas de varias generaciones. El recuerdo del icono de la edad de oro de Hollywood constituyó una auténtica batalla de cifras en la puja, el afortunado ganador se llevó la histórica pieza a casa por 1.267.000 dólares en 1997 El vestido del «cumpleaños feliz» de Marilyn Monroe. «Quiero un vestido verdaderamente historico, un vestido deslumbrante, unico», pidió la actriz para lucir en una ocasión tan especial al diseñador Jean Louis. El modisto entonces obró el milagro ajustando el mejor género disponible a las exhuberantes formas de su clienta. A continuación adornó las telas con más de 6.000 cuetas de vidrio. El vestido hizo historia El icónico traje de chaqueta azul de Margaret Thatcher. «No, no y no», rotunda, contundente. Así era «la dama de hierro» y así expresó su decisión sobre una posible alianza con Europa. Nadie olvidará su expresión iracunda en la Cámara de los Comunes, tampoco su taje de chaqueta azul El icónico traje de chaqueta azul de Margaret Thatcher. La ex primera ministra inglesa utilizaba su indumentaria para mostrar su poder. Apostaba por los colores eléctricos, las líneas angulosas y los cortes limpios. Este traje de lana en azul rey -el color del Partido Conservador- con interior de piqué y botones dorados fue uno de sus modelos más emblemáticos. Se vendió por 31.200 euros El reloj de Cartier de Jackie Kennedy. El modelo «tanque», de Cartier, adornó las muñecas de la primera dama de los Estados Unidos durante muchos años, así lo atestiguan numerosas instantaneas en las que fue retratada vistiéndolo. La casa de subastas hizo coincidir el evento con el aniversario de la «50 Mille Hikers», una marcha propuesta por el John F. Kennedy para fomentar la resistencia mental y física de os militares El reloj de Cartier de Jackie Kennedy. Tardó en conocerse la identidad de la persona que resistió hasta el final en la puja hasta llevarse a casa el reloj por 317.440 euros. Fue Kim Kardashian, la más mediática de su estravagante clan, que confesó profesar especial admiración por Jacqueline Kennedy desde niña El vestido de Audrey Hepburn en «Desayuno con diamantes». La escena en la que una ingenua Holly Golightly contempla el escaparate de la joyería Tiffany's después de comerse un croiessant convirtió a este vestido en un objeto de culto que permanecería cosido siempre al recuerdo de Audrey Hepburn en la memoria colectiva El vestido de Audrey Hepburn en «Desayuno con diamantes». Además de un objeto de culto, es el vestido más importante diseñado por Givenchy. El modisto era amigo personal de Hepburn y diseñó el modelo especialmente para la película, nada podía salir mal. El vestido por el que se pujó en la subasta -el original- es ligeramente distinto al que aparece en la película porque para la época, era demasiado escotado. Una cuestión que no parece haber preocupado a su actual dueño, que pagó 693.600 euros para que formase parte de su armario El Aston Martin DB10 que utilizó Daniel Craig en James Bond. Coches de lujo, relojes y trajes caros, las 24 películas protagonizadas por el Agente 007 mostraron piezas de lujo en cada escena, ahora los icónicos objetos tienen un valor añadido, forman parte de la historia del cine. El Aston Martin que conducía Craig en «Spectre» se vendió por 2.721.349 € El bikini de Ursula Andress en Agente 007 contra el Doctor No. No se imaginaba la diva durante aquel complicado rodaje que el bikini blanco que lucía acabaría adquiriendo un valor en 2001 de 47.752 euros Traje de Tweed de Cocó Chanel. «Chanel revolucionó la moda con un jersery negro y diez filas de perlas», así lo manifestó Christian Dior. La diseñadora marcó un hito insuperable en el universo de la moda y es un icono de la independencia femenina. El concepto al que representa la figura de Coco Chanel pasa por encima incluso de su obra. Por supuesto, su nombre pasará a la historia como un referente del lujo y del buen gusto. Traje de Tweed de Cocó Chanel. El traje de la imagen es uno de los modelos más especiales de su colección personal. Las 6.400 libras por las que el vestido fue adquirido en la subasta equivaldrían hoy en día a 13.900 euros. Otro de sus históricos modelos fue el vestido negro con el que acudió al estreno de una pelicula de Lucino Visconti, causó furor en Hollywood y en la subasta, ya que se adquirió por una suma de 1.924 euros. Autorretrato, Frida Kahlo. La pintora Mexicana despierta la devoción de mitómanos de todo pelaje tanto por las cualidades de su obra como por su histora personal, en la que el apasionamiento y el drama caminan de la mano de la artista. Sus manera de crear está marcada por un accidente de autobús que la dejó postrada en una cama durante meses cuando era adolescente y cuyas consecuencas arrastraría durante el resto de su vida Autorretrato, Frida Kahlo. Los cuadros de la mexicana representan las primeras muestras de arte latinoamericana cuyo valor supera en una puja el millón de dólares. Cuando pintó «Autorretrato con el pelo suelo» tenía 40 años y estaba pasando una época especialmente delicada, durante ese año se sometió a aparatosas operaciones que le causaban mucho dolor. La manera en la que expresa sus sentimientos sobre el lienzo se pagó en la última subasta con 2.011.500 El vestido de Judy Garland en Mago de Oz. Con el paso de tiempo, la película suma seguidores, el día que Christies abrió la subasta en la que se ponían a disposición del cliente varios objetos del filme, la casa de subastas reunió a más de 800 seguidores, era 1993. Los zapatos de tacón con los que recordamos a su protagonista -«chapiens de rubí»- alcanzaron un valor de 552.347 euros