Hazte premium Hazte premium

UIMP

Atraer la ciencia a los más jóvenes, un reto para los docentes y las instituciones

Más recursos humanos y apoyos en las aulas, claves para enganchar a los estudiantes a las materias que marcarán el futuro laboral por la digitalización en las empresas

Javier Fernández Panadero ofrece herramientas novedosas a los profesores JUAN MANUEL SERRANO ARCE

J. AGUILAR

Las asignaturas de ciencia suelen ser las materias que más trabajo cuesta a los estudiantes sacar adelante, hecho que causa un mayor rechazo. Además, según un estudio realizado recientemente por Adecco, los niños españoles quieren ser futbolistas o profesores de mayores, mientras que las profesiones relacionadas con la ciencia queda relegada a un segundo plano. Para revertir esa situación, el docente Javier Fernández Panadero intenta atraer más la cultura científica a los más jóvenes realizando shows y publicando libros de divulgación. Además, también ayuda a los docentes ofreciendo las herramientas claves para divulgar la ciencia «con gancho», como en el taller «Contar la Ciencia es un tostón… o no», que ha impartido en los cursos de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en Santander.

-¿Qué elemento le hace falta a la ciencia para ser atractiva a los más jóvenes?

-Por un lado, apoyo institucional: con cursos, con programas en los medios públicos… y creértela como un producto de calidad que cuenta con contenidos entretenidos. La ciencia no es un tostón, hay mucha gente que se dedica a la ella sin ser idiotas ni Sheldon Cooper. La ciencia es muy divertida. Hay que contarla bien en los institutos y divulgarla bien porque explica el mundo en el que vives. Si te lo cuentan bien, es chula.

-¿Hace falta entonces un cambio en la enseñanza?

-Sí, pero no sólo en ciencia. Con la enseñanza hay que apostar por ella como elemento de cambio social, creer en ella como inversión de futuro y no como un gasto. Si te ponen a dar clases a 30/40 niños a la vez, es muy difícil. Pero si se tuviera tiempos de laboratorios, más medios, menos alumnos por clase, se podrían hacer más cosas. Es un problema de la educación en general. Hacen falta recursos. Pero no tablets y esas herramientas, sino recursos humanos.

-¿Con más prácticas en clase sería más fácil atraer a los estudiantes?

-Claro, pero ahí es clave la ratio profesor/alumno. Tú no te puedes meter solo en un laboratorio con 30 estudiantes. Lo más importante, al final, más que los medios materiales, son los medios humanos, que es donde creo que se pueden hacer muchas mejoras.

-¿Cómo se puede motivar a un estudiante que le hace falta dar el paso para acercarse a la ciencia?

-Aparte del colegio, hay muchos medios: campamentos, charlas, shows, libros de experimentos… Tanto en la enseñanza reglada como en la no reglada hay muchas cosas. Por poner un ejemplo español, en el programa El Hormiguero suelen hacer experimentos y tiene mucha audiencia de todas las edades. El problema es que como es entretenimiento, no dedican ese minuto extra para explicar lo que están haciendo. Pero en realidad demuestra que se puede hacer un contenido de ciencia en prime time y generar audiencia. Si se siguiera ese modelo se generaría muchas vocaciones y cultura científica.

-¿La sociedad ha podido catalogar un poco como de «bichos raros» a aquellas personas que les gusta la ciencia?

-Sí, pero creo que eso se está difuminando un poco. Ahora hay chavales que se le dan bien los deportes, que salen con sus amigos y se les da muy bien la ciencia. Entre todos, cada uno desde su posición, y a pesar de que nos reímos con series como «The Big Bang Theory», intentamos rascar esa imagen. Es una ocupación más y muy bonita.

-¿Hace falta un referente famoso nacional para los más jóvenes?

-Sí, eso ayuda. En España somos muy de seguir al líder. Con Alonso todos empezamos a ver la Fórmula Uno, por ejemplo. También nos pasa en política. Si fundas un nuevo partido sin un líder claro, te irá mal, a pesar de que sigas su programa. En algunos países hay divulgadores que son estrellas mediáticas como Neil deGrasse Tyson en EE.UU. y Brian Cox en el Reino Unido. Aquí falta un referente. De todas maneras, ese carisma se saca también apostando por él.

-Muchos ligan el futuro de las profesiones a la digitalización, ¿tiene España un atraso en ese aspecto?

-Sí, vamos siempre un poco por detrás. Y eso se arregla a largo plazo e invirtiendo en investigación y desarrollo. Se suele decir que los países ricos invierten en ello, pero es al revés: quien invierte en investigación y desarrollo se hace rico. Aquí estamos en el sentido contrario. Muchos científicos se están marchando fuera, lo que supone añadir ese valor a otros países después de habernos gastado el dinero en la formación. Como manejo de país es un suicidio.

-Porque aquí hay talento...

-Claro, como en todos lados, pero habría que invertir en ello. Tenemos un país que cuenta con un entorno acogedor, derechos sociales, buena medicina… si invirtiéramos en ciencia, saldría más talento. Y es una pena, porque suelen decir que no hay dinero, pero en la práctica vemos que éste se ha malgastado en otras cosas.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación