Hazte premium Hazte premium

Huevos de Pascua

Cómo hacer los mejores huevos de Pascua

Al respecto del interior del huevo, se pueden incluir otros bombones o dulces allí a modo de sorpresa extra o directamente rellenarlo todo de chocolate

Elaboración de un Huevo de Pascua en la Pastelería La Duquesita Maya Balanya

ABC.ES

Hacer huevos de Pascua es bastante sencillo y el único secreto es tener a mano un buen chocolate sólido , moldes con forma de medio huevo y paciencia a la hora de trabajar el inestable chocolate. La temperatura del cacao es fundamental para lograr la anhelada forma de huevo y no acabar con la estructura descuajaringada antes de tiempo.

Lo primero es derretir chocolate al baño maría, a fuego lento. Lo mejor es hacerlo poco a poco y moviéndolo con una lengua de goma para que no se pegue. La temperatura ideal en este paso está entre unos 30 y 32 grados para poder modelarlo con tranquilidad. Lo importante es que el chocolate no se endurezca.

El siguiente paso es pintar los moldes con el chocolate caliente y meterlo a enfriar en la nevera durante unos diez minutos. Sacamos el molde, lo volvemos a pintar y lo metemos otra en la nevera. Así hasta que la cobertura tenga el grosor suficiente para resistir. No obstante, el grosor va en función de los gustos de cada uno , pero no hay que dejarlo demasiado fino (podría romperse) ni demasiado gruesa (nos costaría luego pegar la otra parte del huevo).

Para conseguir que nuestro huevo de Pascua tenga un aspecto rayado, antes de pintar el molde con nuestro chocolate podemos pintar los moldes previamente con hilos de chocolate blanco. Existen otras opciones para esta decoración exterior, pero en todos los casos hay que vigilar que no se impregne con las sucesivas capas de chocolate que se irán aplicando con el pincel.

Para que nuestro huevo de Pascua tenga un aspecto rayado, antes de pintar el molde con nuestro chocolate podemos pintar los moldes previamente con hilos de chocolate blanco

Ahora, con la cara A y B del huevo ya listo, a un buen grosor y un estado sólido, debemos igualar los bordes. Podemos limarlos con un cuchillo o con unas tijeras. Para unir las dos partes la mejor opción es pintar con chocolate caliente el borde de una de las dos mitades y que el propio chocolate ejerza de pegamento. Para que se note lo menos posible la unión, se puede limar también los puntos de unión. Incluso hay quien arma un pequeño merengue, lo introduce en una manga pastelera y «dibuja» una especie de trenza sobre la unión de los cascarones del huevo. Ese mismo merengue se puede utilizar después para decorar el huevo.

Al respecto del interior del huevo, se pueden incluir otros bombones o dulces allí a modo de sorpresa extra o directamente rellenarlo todo de chocolate. En este segundo caso en vez de pintar los moldes habría que volcar el chocolate caliente sobre las dos partes del molde y, previo paso por el frigorífico, valerse de varias capas de chocolate caliente para unir la cara A y la B.

Huevos decorativos

Otra posibilidad de celebrar la Pascua es hacerlo con huevos solamente decorativos. Una sencilla y divertida forma de hacerlo consiste en pintar huevos con divertidas decoraciones.

Maya Balanya

En este caso lo primero es vaciar el interior de un huevo con dos agujeros hechos con el alfiler en cada uno de los extremos huevos que se van a pintar. Se puede soplar por uno de los agujero o recurrir a un palito para extraer todo el contenido. Luego se lava bien el huevo por dentro y por fuera . Para este paso es recomendable armarse de paciencia o tener varios a mano dado lo frágil de la cáscara. A la hora de pintarlo es una buena opción introducir un palillo en el huevo vacío y, clavado sobre un corcho para sujetar el huevo, y poder trabajar cómodamente sobre él.

El siguiente paso es pintar la base, ya sea sumergiendo la totalidad del huevo en un vaso de plástico lleno hasta la mitad con pintura, vinagre y agua tibia. Si quieres que el efecto de color sea borroso añade un poco de aceite vegetal a la mezcla. Otra opción es pintar la base con spray de colores o con pintura acrílica extendida con un pincel.

Si se prefiere usar huevos duros como decoración (en este caso solo temporal) está la opción de darles color añadiendo alimentos que colorean en el proceso ebullición. Espinacas (verde), remolacha (morado), azafrán (amarillo), café (marrón) o arándanos (azul) otorgan una tonalidad a los huevos sin necesidad de pinturas.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación