Así destapó el periodista Alfred Salud el fraude de Paco Sanz

Sanz, afectado de síndrome de Cowden, aunque no «enfermo terminal», según confirman fuentes médicas próximas al caso, llevaba casi una década aireando su sentencia de muerte en las redes sociales con la intención de obtener fondos para, según alegaba, poder ir a EE.UU. a curarse. Ayer trascendió que con su campaña podría haber defraudado hasta 200.000 euros, aunque no se descarta que la cifra sea más elevada porque la investigación sigue en marcha.

Salud contactó por primera vez con Sanz en 2013 cuando decidió invertir en su causa. Le pidió a través de las redes sociales detalles sobre su situación y éste le emplazó de inmediato a que le llamara por teléfono.

«Es un embaucador, se maneja con mucha habilidad en las distancias cortas», asegura el periodista en una entrevista concedida a ABC . Cuando Sanz le descolgó el teléfono, Salud le lanzó tres escuetas preguntas: «¿En qué centro de EE.UU. vas a tratarte?, ¿Qué doctor va a llevarte? y ¿En qué fechas vas a ir?». Sanz no respondió a ninguna. «¿No te fías de mí?», le dijo.

Desde entonces, ambos mantienen una guerra abierta en las redes. «Me ha insultado directamente en tweets y también indirectamente a través de conocidos míos a los que les ha hablado mal de mí», explica el denunciante. Alfred lleva tiempo sopesando junto a su abogado la posibilidad de presentar una denuncia apoyándose en sus propias pesquisas y quizás en la denuncia de alguno de los afectados por el fraude, aunque ahora que ha estallado el caso son muchas más las personas que valoran llevar su denuncia ante los tribunales. Por este motivo, el periodista estudia, junto a su asesor legal, la posibilidad, si finalmente los afectados se deciden, de presentar una denuncia conjunta contra el valenciano.

«La gente era más reacia a dar su testimonio cuando no habían más que sospechas. Ahora la situación ha cambiado», apunta Alfred Salud. Reconoce que se siente «satisfecho» por el desenlace de la historia. «Me siento bien porque algunas de las pistas que yo he levantado han llevado a la gente a sospechar y a denunciar el caso», dice Salud, aunque asegura desconocer el nombre de la persona que interpuso la denuncia en Madrid, que condujo a la detención de Sanz.

«No le deseo ningún mal, aunque espero que si se confirma que estafó a tanta gente, caiga sobre él todo el peso de la ley», dice el periodista.

Alfred Salud está convencido de que el alcance de la presunta estafa irá a más. Una de las incongruencias que condujo a este periodista a investigar fueron los mensajes contradictorios que lanzaba la familia. «Su madre salió en 2010 en la televisión anunciando que vendían su casa, valorada en un millón de euros, para poder ayudar a su hijo. La casa sigue sin venderse y me consta que se ofrecieron hasta 600.000 euros por ella», concluye.