Hazte premium Hazte premium

Armengol rebajará finalmente la exigencia de catalán en la sanidad pública balear

Médicos y enfermeros podrán presentarse a oposiciones sin tener que acreditar la correspondiente titulación lingüística, si bien deberán lograr el nivel de catalán requerido en un plazo máximo de dos años

El Sindicato Médico de Baleares valora positivamente los cambios, pero sigue pidiendo que el catalán sea sólo un mérito, por lo que en principio votará en contra de esta nueva propuesta del Govern

La presidenta del Gobierno balear, la socialista Francina Armengol

JOSEP MARÍA AGUILÓ

La presidenta del Gobierno balear, la socialista Francina Armengol, ha asegurado este martes en el Parlamento regional que su Ejecutivo aprobará un decreto lingüístico «con consenso», en referencia a la futura norma autonómica que regulará el conocimiento de catalán que se exigirá a los médicos y enfermeros que deseen trabajar en la Comunidad. Ello supondrá, de facto, que se rebajará finalmente la exigencia de catalán requerida en la sanidad pública. Armengol ha hecho ese anuncio en respuesta a las preguntas formuladas sobre dicha cuestión por parte de la portavoz del PP, Marga Prohens, y del portavoz de Cs, Xavier Pericay , en el pleno celebrado esta mañana. Prohens y Pericay han vuelto a pedir que el citado decreto sea retirado y que por lo tanto no se apruebe finalmente.

En estos momentos, todo apunta a que hay ya un principio de acuerdo entre el PSOE y MÉS sobre esta cuestión. Así, salvo sorpresas de última hora, se aprobará un decreto en el que si bien el catalán seguirá siendo un requisito para poder trabajar en la sanidad pública, los posibles aspirantes podrán presentarse a oposiciones sin contar aún con la titulación de catalán exigida para cada nivel profesional. Dicha titulación se podrá conseguir en un plazo máximo de dos años a partir del momento en que un profesional haya conseguido una plaza en las oposiciones. Además, también se rebajará el nivel de catalán que se exigirá a médicos y a enfermeros. Inicialmente, estaba previsto que debería acreditarse un nivel B2 —avanzado—, pero finalmente será suficiente con tener un nivel B1 —básico— de catalán.

En la presente legislatura Armengol gobierna en Baleares gracias al apoyo directo del PSOE y de MÉS por Mallorca, así como al aval parlamentario de Podemos y de MÉS por Menorca. La posición de los socialistas con respecto a la exigencia del catalán ha sido normalmente más flexible que la de sus socios ecosoberanistas . En ese contexto, cabe recordar que el pasado verano el Servicio de Salud había dictado una resolución inicial en la que dispensaba del conocimiento del catalán a médicos y enfermeros. La presión de MÉS obligó al PSOE a retirar dicha resolución y a aceptar la redacción de un nuevo decreto, que es el que hasta ahora aún no se ha podido aprobar de manera definitiva por las recurrentes divergencias entre ambas formaciones.

Un proceso inacabable

El borrador del controvertido decreto fue aprobado inicialmente en la reunión de la Mesa Sectorial de Sanidad celebrada en noviembre del pasado año, pese a la oposición del Sindicato Médico de Baleares (Simebal) y el Sindicato de Enfermería (Satse), mayoritarios en el sector. Ambos sindicatos, que defienden que el catalán debería ser sólo un mérito, anunciaron que impugnarían el mencionado decreto en caso de que entrase en vigor sin ningún cambio con respecto a su redacción originaria.

Armengol ha reconocido este martes en la Cámara regional que la primera propuesta de decreto no tuvo « el consenso suficiente » y ha confirmado que en la propuesta en la que ahora se está trabajando se prevé dar «tiempo suficiente» a quienes se presenten a oposiciones para obtener la titulación lingüística que se exigirá.

Tanto Simebal como Satse han hecho ya una primera valoración sobre esta nueva propuesta de decreto. Ambos sindicatos valoran positivamente los cambios que se quieren introducir con respecto al primer borrador presentado en noviembre, si bien Simebal insiste en que el catalán debería ser un mérito y no un requisito. Dicho sindicato cuestiona además que en la nueva propuesta de decreto se limite la posibilidad de que los nuevos funcionarios sanitarios puedan optar a la movilidad, la promoción y la carrera profesional en caso de que no consigan acreditar el nivel B1 de catalán en el mencionado plazo máximo de dos años. Por todo ello, en principio Simebal votará en contra de la propuesta anunciada este martes por Armengol. Satse, por su parte, ha sido menos crítico con el nuevo borrador que se les presentará en breve, pero quiere estudiarlo a fondo antes de decidir si finalmente lo apoya o no.

A la espera de la aprobación del mencionado decreto, de momento sigue rigiendo lo establecido por la Ley de la Función Pública. Ello ha permitido que recientemente el Servicio de Salud de Baleares haya podido eximir del conocimiento del catalán a ocho jefes de servicio del Hospital de Son Espases, ubicado en Palma. Una decisión en esa misma línea se había producido ya en diciembre en el Hospital de Can Misses, en Ibiza, cuando el requisito del catalán quedó excluido en la convocatoria para cubrir ocho plazas en Urgencias. Igual ocurrió hace dos meses en el Hospital Mateu Orfila, en Menorca, que publicó una convocatoria para cubrir tres plazas de jefe de servicio con idéntica exención.

Una creciente oposición

Más allá de las divergencias que habían mantenido desde hacía más de medio año el PSOE balear y MÉS por Mallorca con respecto a cómo debía ser el futuro decreto, lo cierto es que en los últimos meses la futura norma había generado una creciente controversia a nivel social. Así, el Satse de Baleares confirmó el pasado mes de diciembre la marcha de decenas de enfermeras de Ibiza ante la inminente aprobación del citado documento.

Fue también en diciembre cuando unas 2.000 personas participaron en Mahón, capital de Menorca, en la manifestación convocada por la plataforma civil ciudadana Mos Movem (En Marcha) bajo el lema « Los idiomas no salvan vidas . Por una sanidad sin fronteras lingüísticas». Para el próximo 18 de febrero está convocada otra movilización por parte de Mos Movem en esa misma línea, que en este caso se celebrará en Palma. Una representación de Mos Movem ha asistido este martes al pleno celebrado en el Parlamento balear. La manifestación convocada para el domingo de la semana que viene se mantendrá, pese a los cambios que ahora introducirá el Govern en el futuro decreto lingüístico.

Por su parte, la Asociación para la Lucha Contra las Enfermedades del Riñón (ALCER) de Baleares y la Asociación de Diabéticos de las Islas Baleares (ADIBA) emitieron el martes de la pasada semana un comunicado conjunto para manifestar que sus socios, que padecen enfermedades crónicas, estaban «muy preocupados y muy alarmados ante la imposición de la acreditación lingüística como requisito en la sanidad». Posteriormente, el pasado viernes, el presidente del movimiento ciudadano Valores en Baleares, Juan José Tenorio , registró en el Parlamento regional una proposición no de ley en la que se pide que los partidos políticos insten al Govern a que «impulse la paralización del decreto del catalán».

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación