Los hombres que corren distancias más largas son los más deseados por las mujeres

El principal autor del estudio, el doctor Danny Longman del departamendo de Antropología Biológica, afirma que el hecho de que la carrera de resistencia «esté conectada con el potencial de reproducción del hombre demuestra que, en nuestro pasado como especie cazadora, las mujeres podían considerar el correr como una señal de buena pareja reproductiva».

La capacidad de resistencia en la caza, agotando a la presa en su persecución, era vital para conseguir el alimento, por lo que los hombres que podían correr distancias más largas eran los más deseados por las mujeres, algo que según los investigadores se ha mantenido a lo largo de los años durante generaciones. Pero esto no se aplica a los velocistas porque no eran tan útiles en las sociedades cazadoras, donde la resistencia era más útil que la fuerza bruta.

Además, los corredores de fondo tienen también otras cualidades como la inteligencia y la generosidad, que tanto buscan las mujeres en sus parejas. El Dr. Longman explica esto por el hecho de que los cazadores eran los que tenían más alimento y, por ello, una familia más sana y numerosa. Y «es probable que utulizaran sistemas igualitarios para el reparto de la carne». Ya no sólo tenían la capacidad de dar caza a la presa sino la inteligencia para acorrarla y engañarla.

Además, el equipo de Longman descubrió que los mejores corredores de medias maratones tendían también a tener más largo el dedo anular, «señal de que habían tenido mayor exposición hormonal en el útero materno».