El alcalde de Torremolinos que llamó a las personas con discapacidad «estorbo» dice que fue descontextualizado

«En ningún caso atribuyo tal término para describir a dichas personas, sino que todo se debe a una torpe interpretación por parte del concejal socialista», declaró el alcalde al diario Sur. Fernández Montes agregó que «a pesar de los ataques del PSOE e IU», seguirá defendiendo a la Asociación de Minusválidos Físicos de Torremolinos (Amifto). Por su parte, Amifto defiende al alcalde y afirma que «sólo intentaba explicar que, en muchos casos, estas personas habían podido ser o sentirse un problema en sus respectivos ámbitos familiares o en la propia sociedad», y que el concejal socialista Jesús Salvador Díaz malinterpretó las palabras del edil.

Por su parte, la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe) condenó las declaraciones de Fernández Montes.

Cocemfe afirmó que sus palabras suponen una ofensa y una agresión a la dignidad de las personas con discapacidad, más graves aún al haber sido pronunciadas por un alcalde en el ejercicio de sus funciones. «No podemos permitir la utilización de estos términos para referirse a las personas con discapacidad (...), un hecho de elevada gravedad al haber sido pronunciadas por un alcalde en el ejercicio de sus funciones como responsable público», indicó la confederación.

El presidente de Cocemfe, Mario García, señaló que este tipo de declaraciones refuerzan estereotipos negativos que conllevan daños para el colectivo. «El movimiento de la discapacidad lleva, precisamente, años luchando contra ellos (los estereotipos), trabajando por que las personas con discapacidad sean tratadas como un miembro más en la sociedad y sean respetadas», afirmó.

Asimismo, Cocemfe también solicitó al Partido Popular de Torremolinos que abra un expediente disciplinario al edil por conducta impropia y lesiva de derechos de minorías, sumándose así a la iniciativa del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi).

El Cermi señaló que «reprueba con toda firmeza las palabras del alcalde», por considerar estas manifestaciones públicas como una agresión a la imagen social y a la dignidad de todas las personas con discapacidad.

En un comunicado, el Cermi indica que «se trata de un caso especialmente grave de menosprecio y burla, pues este alcalde hizo estas declaraciones en el ejercicio de sus funciones como responsable público, en el transcurso de un pleno municipal de su ciudad, circunstancias en la que está especialmente obligado al respeto y a la corrección con todos sus conciudadanos».

El Comité afirma que «todas las personas con discapacidad se sienten heridas por este tipo de expresiones que inciden de modo burdo y grosero en estereotipos devastadores que niegan el valor intrínseco y la aportación de las personas con discapacidad a la vida en comunidad y que han de ser tratadas como un miembro más, respetado y respetable de la sociedad».