Especial bodas 2013: las claves de una buena invitación

Prescindir de ellas es impensable y menos en los tiempos que corren: las invitaciones de boda han sabido reinventarse. De hecho, las especialistas en organización de bodas, Marta Miranda y Marta Maza, de The Big Day , aseguran que «con el desarrollo de las nuevas tecnologías han surgido nuevas formas de comunicarse» y, por tanto, «han aflorado también el auge de las invitaciones online, vía web, e incluso por chat».

Sin embargo, a los invitados parece que les cuesta más recibir una tarjeta virtual, sobre todo a las generaciones anteriores y, por ello, las invitaciones en papel siguen siendo las más demandadas. Aún así, un modo no excluye al otro y hay novios que optan por «hacer combinaciones que facilitan el feedback de los invitados».

A la hora de elegir una invitación, los novios no lo tienen nada fácil. Existen miles de modelos (en modo puzzle, calendarios, enlatadas...), formas, colores, texturas... El tipo de papel, el color, la calidad de impresión o la letra son elementos clave para lograr una buena tarjeta pero «la invitación perfecta es aquella que mejor refleja la personalidad de los novios». Además, Miranda y Maza reseñan que todas deben ir siempre con su sobre porque «aportan una mejor presentación y conservan la privacidad del contenido».

Respecto a los precios, también los hay para todos los gustos. Las parejas pueden encontrar invitaciones desde 1 euro pero «en estos tiempos de crisis, el ‘DIY’ (Do It Yourself) está muy de moda». El hecho de que una pareja haga su propia invitación «aporta autenticidad y originalidad» y cada vez son más los novios que prefieren ponerse manos a la obra.

Ya sean cuadradas, rectangulares, negras y blancas, con dibujo o sin él, existen una serie de datos fundamentales que toda invitación de boda debe tener. Según las expertas, el nombre de los novios, fecha, hora, lugar y datos de contacto son imprescindibles aunque «también se pueden poner los nombres de los padres /familia, lista de bodas o número de cuenta, mapa para llegar, confirmación de autobuses (en caso de que los novios los pongan a disposición de los invitados), web de los novios (en caso de tenerla) y demás información que consideren oportuna».

¿Y cuando entregarlas? «El tiempo estándar para mandarlas lo marca cada boda», puntualizan Miranda y Maza. «Es decir si la mayoría de invitados están en la misma cuidad de los novios, con tres o cuatro meses de antelación sería suficiente. Si los invitados se tienen que desplazar desde otra cuidad o país, es conveniente enviarlas con mayor antelación».

Por último, las expertas señalan que, por protocolo, «se suele invitar una invitación por familia que vivan en la misma vivienda, siempre y cuando esté toda invitada» y en el sobre se indicará a quién va dirigido (Familia Sotomayor). En los casos en los que solo se invite al matrimonio, los novios deberán entregar la invitación al mismo (Sres. Sotomayor) y «para personas individuales, con nombre y apellido es suficiente».