Tres recetas rápidas y exquisitas de comida «reciclada» para no tirar las sobras

Los lunes suelen ser (además de pesados) jornadas ideales para meterse entre pecho y espalda las sobras de la comida del domingo . Y es que, el último día de la semana suele ser sinónimo de recetas copiosas y pesadas para dejar saciada a la familia que suelen acabar con multitud de platos a medio acabar. Por ello, hoy te proponemos tres recetas perfectas para los más pequeños elaboradas con esos restos aparentemente molestos que nos quedan por el frigorífico.

1- Fajitas . ¿Quién no ha pasado por un restaurante mexicano y ha pensado en gastarse 30 euros para comerse unos buenos tacos o fajitas? Pues tú puedes hacerlo en casa, y gastándote solo unos euros. Para ello, lo primero que tienes que tener en la nevera son las sobras de ese cocido tan castizo que suele hacerse cuando te reúnes con tu familia. Con todo, también te vale desde el pollo hasta la ternera que se haya cocinado el fin de semana.

Una vez que tengas la carne (provenga de donde provenga) no tienes más que darle una vuelta en la sartén con pimiento y cebolla , añadirle tu especia favorita (también valen las bolsas de especias mexicanas que se venden en el supermercado) y meterlo todo en una torta de maíz. Si no tienes de estas por casa, puedes sustituirlas por algo de arroz blanco . Lo mejor es cargar bien de carne el plato, ya que la idea es eliminar las sobras y ahorrar en el resto de ingredientes.

2- Humus castizo . Vale, ya he aprovechado la carne. Pero... ¿Qué hago ahora con los garbanzos que me han sobrado del cocido? No te preocupes, pues te vamos a dar las claves para que elabores en casa tu propio humos castizo. Es decir, un puré de garbanzos con cierto toque ibérico.

Para ello, lo primero que debes hacer es colar los garbanzos que tengas en la nevera y, una vez que los tengas separados, picarlos junto a un yogurt griego , media taza de zumo de limón, un poquito de comino (cuidado porque su sabor es potente) y aceite. ¿Sencillo verdad? Pues en un restaurante especializado te cobrarán un buen pico por ello. Otra opción es añadir a los garbanzos varias verduras y hacer un puré , aunque no suene tan «chic».

3- Pastel de jamón york al micro . Nuestra última receta de hoy es un pastel elaborado con el jamón york y el queso que nos ha sobrado de la merienda de los peques. Hacer esta receta es tan fácil como coger un molde y echarle un poco de mantequilla para luego poder sacar el resultado de su interior.

A continuación, batimos un par de huevos les añadimos leche, sal y pimienta y empapamos varias rebanadas de pan de molde con el mejunje. ¿Todo listo? Pues toca montar todo. Ahora debes ir introduciendo en el molde una capa de jamón york, otra de queso y, finalmente, una de pan (cuidado que no se rompa). Para terminar, metemos el resultado cinco minutos al micro, dejamos que enfríe, y para adentro.