Hazte premium Hazte premium

champions league

Esto es Anfield, y esto es el Real Madrid

Exhibición de los blancos, que hacen una demostración de poderío ante un Liverpool impotente

Esto es Anfield, y esto es el Real Madrid reuters

josé manuel cuéllar

El templo del fútbol, el «Esto es Anfield» grabado en el túnel camino del campo, el «Nunca caminarás solo» en las gargantas de las gradas, el olor a madera, a hierba fresca, a autenticidad... Sí, esto es Anfield. Y esto es el Real Madrid , en plena ebullición, con todo su poderío, dando una exhibición impresionante como no se había visto en los blancos hace tiempo. [ Narración y estadísticas ]

Anclado en un 4-4-2, el Madrid mostró esa solidez que suele tener con centrocampistas de calidad sobre el campo. Aguantó el empellón inicial de los reds (pura gaseosa) durante los primeros cinco minutos y luego se puso a tocar, y a tocar muy bien, con rapidez, con claridad (portentosa primera parte de Kroos y Modric) y con mucho talento en todas las líneas.

Además de eso... Cristiano, que es otra cosa. Salió con la cabeza puesta en que estaba en un templo sagrado, en un escaparate único, en un partido especial. Cuando Cristiano se ve en esa tesitura se muestra letal porque pone todos los sentidos (aún más que normalmente si cabe) en el choque. En cuanto se puso a dominar el encuentro, el Madrid marcó. Un gran pase de James lo empaló Cristiano con una habilidad tremenda, lejos de Mignolet.

El gol descompuso a un Liverpool flojito de por sí. Puso mucho carácter, actitud y fuerza en el choque, pero era muy inferior. Con muchos problemas atrás y separadas las líneas, el físico le fue abandonando a medida que se imponía la técnica del Madrid. Benzema marcó dos veces más (el primero en un cabezazo lleno de temple y calidad) y el partido se fue al limbo de los justos. Para colmo, Casillas hizo dos paradas de mucho mérito y, como en los viejos tiempos, el palo vino en su ayuda en el posterior intento de Coutinho.

Peligro a la contra

Rodgers, se supone que irritado, quitó a un Balotelli realmente desafortunado y metió a Lallana, jugador muy técnico pero más flojo físicamente. El Liverpool, por el cambio y porque el Madrid se dio por satisfecho, adelantó líneas, pero sin crear peligro realmente serio.

Por contra, los blancos, con un excelente Isco, creaban inquietud en cada contra y si no liquidaron el choque con una goleada mayor fue porque el equipo bajó tres grados, al menos, en su intensidad. Aún así, casi nunca pasó apuros y acabó jugando con el resultado y con el tiempo para acabar el partido sin problema alguno.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación